21 de las 28 parroquias de Vila de Cruces vieron mermado su censo de habitantes el año pasado. Es un más de las que habían decrecido en el ejercicio inmediatamente anterior. Solo cuatro consiguen aumentar su cifra de vecinos, aunque mínimamente, y son: Añobre -por segundo año consecutivo-, Brandariz, Carbia y Toiriz. Otras tres entidades mantienen idéntica cifra que un año antes: Asorei, Cumeiro y Ferreirós.
La propia capital municipal lidera la sangría demográfica en términos brutos, con 38 censados menos, si bien su caída en términos relativos es del 3,1%. El mayor desplome en este sentido corresponde a Arnego, que, con cuatro vecinos menos, cede casi un 10% de su anterior total. Le sigue Gres, que pierde doce empadronados, lo que supone un retroceso del 8,5%. El tercer lugar es para Piloño, también con una docena menos, que le suponen un 4% de caída. Tras la actual capital, como siguientes feligresías en cifra de habitantes continúan Camanzo, Merza y Carbia, antigua sede municipal.
En su totalidad, el municipio cruceño retrocedió en 2016 en 121 habitantes, es decir, un 2,1%, y quedó con 5.435 empadronados. El descenso es prácticamente idéntico al del curso precedente, cuando había bajado en 120 vecinos, y muy inferior a la de 2014, cuando había visto caer su padrón en 258 (4,3%), mientras que en los dos ejercicios anteriores habían sido 151 (2,4%) y 240 (3,8%), según los datos del Nomenclátor que difunde cada año el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En cambio, a 1 de enero de 2016 se mantenía idéntico número de lugares con menos de diez habitantes y, por tanto, en riesgo de desaparición, que un año antes. Son 24 las aldeas en esta tesitura, cuatro más que en 2014 y seis en comparación con 2013. La lista la componen: Eirexe y O Outeiro (Arnego), Armada (Bascuas), Aguiar, O Cruceiro y Salgueiros (Fontao), Castro y Couto (Insua), Caldavila, Espiñeiro, Loño y Outeiro (Loño), Lamela do Medio, Outeiriño y Penagudín (Losón), A Dobreixa y Paradela (Merza), Eirexe y Souto (Oirós), Amosa y Casanova (Ollares), Arxe (Portodemouros) y Mosteiros (Toiriz). Barrio, en la parroquia de Arnego, repite por segundo ejercicio consecutivo con un empadronado tras haber estado años sin gente.
Cuatro de los cinco lugares de más de cien habitantes retroceden. La excepción es Brandomés, en Brandariz, que gana cuatro y pasa a tener 136. El resto, junto con Vila de Cruces, son: Fontao e Vilar (Fontao), con 155, tras perder 5;; y A Moa y Outeiro, en Merza, con 112 y 103, tras ceder 3 y 2, respectivamente.
Como lugares deshabitados se mantienen los tres del curso precedente: Brandariz, en la parroquia del mismo nombre, Souto (Insua) y Silvares (Merza).
