La Mesa Intersindical de Bombeiros de Galicia difundió ayer una "Carta aberta ao vicepresidente Alfonso Rueda" en la que UGT, CIG, CIGCCOO el Sindicato Independente de Bombeiros de Galicia desmienten la "respuesta tipo" que entienden que dio en el Parlamento el 23 de mayo al ser interpelado sobre "las consecuencias del traslado de la central del 112 a A Estrada" y del "cambio forzado e improvisado del sistema de gestión de llamadas" en la atención a las emergencias de Galicia: "nada es cierto, todo va bien, solo hay un problema laboral de los trabajadores con la empresa". La Mesa Intersindical de Bombeiros de Galicia también critica que cuestione "la veracidad de los trabajadores" de emergencias que "cada día somos testigos de las situaciones dramáticas que el mal funcionamiento del último mes está causando a los ciudadanos".

Admite que existe un "conflicto laboral entre la empresa y los trabajadores" pero ve "ruín y tomar por tontos a sus oyentes" tratar de "esquivar la responsabilidad en el caso cuando el desencadenante fue la decisión unilateral y no consultada de la Xunta de Galicia de trasladar la sede del 112 a A Estrada. Lo mismo opina de "achacar" los "problemas (que después niega) en la gestión de las llamadas a la situación de huelga" pese a los "servicios mínimos del 80%" y de trasldar "los problemas resultado de sus decisiones a los trabajadores " que sufren "as consecuencias de estas". Remarca que Rueda obvia "la denuncia clara y pública desde el primer día" de que "el problema" "se deriva única y exclusivamente del mal funcionamiento del nuevo sistema implantado (o más bien aun en implantación, con módulos desactivados para intentar disminuir los cuelgues de este) y a la falta de pruebas y formación suficiente y adecuadas, no a la acumulación de llamadas en cola por la disminución de personal por servicios mínimos". Ve cuestionado y menospreciado el apoyo que ámbitos como los bomberos trasladan a los operadores del 112 porque "como parte de la cadena también estamos notando y sufriendo los retrasos que produce" y el "agravamiento de las situaciones que encontramos".

De hecho, la Mesa Intersindical de Bombeiros califica la situación como de "extremadamente grave" y estiman que Rueda y el director xeral de Emerxencias serán "los principales causantes" cuando cualquier afectado "decida exigir responsabilidades". Y ejemplifica esa gravedad con tres "graves retrasos" presuntamente causados por el sistema de atención de llamadas del 112 solo tres días después de la intervención de Rueda en el Parlamento.

Se refiere a un accidente en Cesuras para el que se movilizó al Parque Comarcal de Betanzos pero cuyos efectivos no lograron contar telefónicamente con el 112 para gestionar la información del siniestro al llegar al punto. Apunta que si hiciesen falta más medios no hubieran podido movilizarse y que al acabar los bomberos tuvieron que buscar una alternativa para comunicar al 112 que ya estaban disponibles para cualquier otra emergencia. Alude también a un incendio en una cocina de Pontecesures, que sufrió un retraso de 40 minutos para contactar con el 112 para que movilizase al parque de Vilagarcía, si bien, afortunadamente, voluntarios de Protección Civil lo controlaron con un extintor.Y cita también un incendio en un garaje de Monforte. Vecinos e intervinientes del Paraue Comarcal de Monforte y reforzados por los de Chantada "denunciaron una tardanza de más de 15 minutos en ser atendidos por el 112, por lo que la movilización de los bomberos la hizieron directamente efectivos de la Policía". Además, al movilizar el refuerzo de Chantada el operador tuvo que enfrentarse a un error grave del programa", asegura.

Solo ve "tres vías": que lo solucione sin "esconderse" en el "conflicto laboral", que niegue la realidad hasta que le lleguen las "consecuencias" y las "responsabilidades" o que dimita.