Una oleada de asaltos nocturnos a negocios locales perpetrados esta semana en A Estrada ha suscitado una creciente inquietud vecinal. Los últimos se produjeron en la noche del jueves al viernes, afectando al despacho de pan de la firma Cervela radicado en la avenida de Pontevedra y al establecimiento hostelero Reencontro, sito en la calle Capitán Bernal. Del primero, los asaltantes se llevaron calderilla y algunas chucherías, además de comerse una napolitana. Al Reencontro, según la hostelera que lo regenta, intentaron acceder sin éxito rompiendo la cristalera. Solo consiguieron romper uno de los dos cristales templados que la componían. También intentaron forzar la puerta pero no lograron vencer la resistencia que opuso un candado de refuerzo.

Fueron los últimos asaltos de esta semana pero no los únicos ya que en noches pasadas de esta misma semana los amigos de lo ajeno también actuaron contra una tienda de ultramarinos de la calle Pérez Viondi en la que no habrían conseguido entrar, y en dos tiendas del Novo Mercado: La Vida Verde y la pescadería Pinche. A La Vida Verde le causaron destrozos en la reja y le llevaron el cambio de la caja. Según explicó su propietario, este asalto ha suscitado inquietud entre los comerciantes. El Novo Mercado está sin conserje y se temen que los asaltantes se hayan podido colar de día y aguardar su oportunidad para actuar de noche.

También esa noche a un vecino del entorno del Novo Mercado le causaron destrozos en los cristales de un todoterreno que había dejado aparcado. Y la noche anterior, la del lunes al martes, la zona de oficinas de la escuela infantil Elfos sufrió un asalto. En este caso, los ladrones se llevaron un equipo informático y una cámara de fotos. Con todo, lo que más le duele a su directora es la sustracción del disco duro, donde tenía acumulados 20 años de recuerdos fotográficos y proyectos educativos.