Manuel Pérez Donsión encontró en la enseñanza una pasión que ahora se traduce en una larga trayectoria como profesor de universidad. Además de ello, lleva publicados una decena de libros donde la calidad de la energía se erige como tema principal. El último de sus libros es en ingles, Power Quality.
-¿A quién está destinado este libro?
-No es para un gran público. Tiene que ser gente dedicada al estudio, es decir aquellos que son estudiantes de ingeniería o profesores. O todo tipo de técnicos y técnicos que se dediquen a la parte eléctrica, al mantenimiento, todos los que estén vinculados con la ingeniería eléctrica pero con un cierto nivel. No valen estos libros para un alumno de FP. El de inglés posiblemente tenga mejor acogida, porque la comunidad científica se mueve en ese idioma.
-¿Cómo está siendo la formación de ingenieros en Galicia?
-Con los nuevos recortes y el plan Bolonia, la carrera de ingeniería tuvo que recortarse en años y materia. Hay un pequeño problema porque el desarrollo tecnológico va a una velocidad impresionante, parece que cada vez se necesita más conocimientos, cada vez más vinculado a las comunicaciones. Pero los alumnos cada vez tienen menos tiempo para prepararse. No solo por la duración, si no el alumno no tiene tiempo para procesar los conocimientos.
-¿Seguimos siendo punteros en energías renovables?
-Hubo un parón muy grande. En la energía eólica, España que era un país residual, pasó a ser el segundo a nivel mundial, por debajo de Alemania. Y en vez de apoyarla están intentando sacar partido. Lo más adecuado no es imponer impuestos por todos lados. No entiendo por qué necesitamos 5 políticos por cada 1 que necesita Alemania, que creo que tenemos las mismas capacidad. Tenemos una estructura a nivel de políticos que hay sostener y es muy complicado, entonces la presión fiscal es la mejor manera para sostenerla. No podemos mantener por cada ayuntamiento una infraestructura como la que tienen, sobre todo en pueblos pequeños. Galicia a nivel del estado era en eólica la más importante, hoy en día ya no lo es. Hay que protegerlas para que avancen.
-¿La fusión de administraciones permitiría ahorro energético?
-Cuanto menos gasto que haya en cuestiones de este tipo redunda en todos que pagamos impuestos para mantenerlo. Por ejemplo, se dice que aquí no hay energía nuclear y las pocas que hay son bastante viejas, pero en Francia sí apostaron por ella. Y nadie le dice a la gente que está pagando en el recibo eléctrico un moratorio nuclear que tenemos en España. Cuando si pasa algo nuclear en Francia también nos repercute. No podemos ser puristas y luego el ciudadano tener que pagar. Y así el recibo eléctrico en España es caro.
-¿Qué le parece el impuesto al sol?
-El impuesto al sol es una locura. Dentro de poco nos lo pondrán por respirar. Me parece incoherente, no tiene sentido es rizar el rizo para intentar sacar por todos los lados.
-¿Es abundante la zona de Deza en desarrollo de energía?
-En general Galicia, pero el Candán es una zona muy ventosa y la tecnología eólica es una tecnología que evolucionó mucho y ahora máquinas cada vez más pequeñas producen más. El problema que tiene Galicia es el clima y la orografía. Pero en cuanto al potencial eólico es muy importante y ahora se está hablando con energía eólica en el mar pero eso perjudicaría las costas gallegas por el impacto visual.
-¿Falta investigación en el desarrollo de energía?
-Siempre es necesaria la investigación. Siempre se necesita un trabajo continuo en este campo. Con la crisis tenemos un parón fortísimo que recuperar que va a ser muy costoso por que mucha gente marcha para fuera porque está descontenta aquí.
