Eduardo Muñiz Alonso era una persona muy conocida en A Estrada. Banquero y empresario, destacaba por su carácter afable y por su capacidad para ganarse en cariño de la gente. El estradense falleció recientemente después que perder la larga lucha que mantuvo contra su siempre delicada salud. Se fue después de vivir el tramo final de su vida con una gran pasión, la misma que lo llevó a conocer una afición tardía que terminaría por ganar a otras. A lomos de su Harley Davidson, Muñiz recorrió España y se integró como uno más entre los cientos de aficionados a estas míticas motos.
El "Abuelo Eduardo", como lo conocen sus compañeros de carretera y como luce en su chaleco, no era uno más. Su carácter le hizo ganarse el cariño de todos. Ese cariño fue el que hizo que cerca de un centenar de personas acudiesen el pasado sábado hasta A Estrada a lomos de sus monturas. Llegaron pilotos y Chapters de diferentes puntos de España y Portugal. Muchos de ellos recorrieron más de 500 kilómetros para estar presentes en homenaje al desaparecido estradense.
Los pilotos llegaron a A Estrada a primera hora de la mañana con sus monturas. Su primer destino fue la iglesia parroquial, donde se celebró una misa en honor al "Abuelo Eduardo". Un chaleco con su nombre y un casco presidieron esta ceremonia mientras las motos lucían ante la iglesia estradense. Esta misa coincidía con una boda, por lo que los pilotos decidieron esperar para retirarlas para que de esa manera el ruido que producen no la enturbiase. Mientras esperaban aprovecharon para concentrarse en la Cafetería Nicol´s. Una vez en marcha se desplazaron hasta la playa fluvial, donde les aguardaba un ágape servido por A Vila.
Los encargados de ejercer de anfitriones en esta celebración fueron la hija de Eduardo Muñiz, Alba Muñiz Sanmartín, y el compañero, amigo y uno de los grandes promotores de este homenaje, José Manuel Fondevila López. La propia Alba Muñiz agradeció el gesto que han tenido los compañeros de su padre y destacó que incluso jóvenes que no lo conocían decidieron participar. La hija del "Abuelo Eduardo" explicó su padre vivió con pasión su afición por el mundo de las motos y de las Harley Davidson, aunque reconoció que se trató de una afición tardía, ya que no se compró su primera moto de este tipo hasta los 65 años. "Fue un acto de rebeldía tardío que nos sorprendió a todos. Ni siquiera se vio muy secundado por sus hijos, ya que nosotros tampoco estamos metidos en este mundo", relató. No pudo estar presente en este acto de homenaje su hermano, Eduardo Muñiz Sanmartín "Tinto", exentrenador del Estradense y ahora segundo entrenador del Negreira, ya que se encuentra estudiando en las Islas Canarias.
