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Gaiteiro a bordo

Juan Ruibal anima con su música a los cruceristas que llegan al puerto de A Coruña

El músico estradense Luis Ruibal (derecha), vestido de gaiteiro.

El estradense Juan Ruibal habla un idioma universal. Entre los meses de mayo y noviembre le toca entenderse con ingleses, alemanes o japoneses. Reconoce que en inglés "chapurrea", aunque no tira de la lengua de Shakespeare para ganarse a sus interlocutores. Lo suyo es la música, acompañada del siempre inteligible lenguaje gestual. Si a ello se suman ciertas dosis de humor, sobran las palabras. Desde hace cinco años este vecino de A Estrada recibe, vestido con el tradicional traje de gaiteiro y al son de la Muiñeira de Chantada, a los cruceristas que hacen escala en el puerto de A Coruña.

La propuesta cultural que protagoniza este músico estradense es una de las alternativas que se oferta a los viajeros de tres navieras antes de que bajen a tierra en esta escala coruñesa. A través de una agencia de viajes de Barcelona, el gaiteiro forma parte de un paquete turístico que también incluye una visita al casco histórico de Betanzos y a una tienda gourmet que termina convirtiéndose en improvisado furancho.

Ruibal ofrece la imagen y la música del gaiteiro tradicional a los turistas tan pronto ponen pie en tierra. Seguidamente, los cruceristas, su guía y el músico estradense suben a un autobús rumbo a Betanzos. Después de que recorran algunas de las zonas de mayor interés de la localidad, el gaiteiro estradense vuelve a salirles al encuentro, en esta ocasión para ofrecerles, ante la Casa do Queixo, una interpretación del Himno do Antigo Reino de Galicia.

A partir de ese instante, Juan Ruibal se convierte en maestro de ceremonias, explicándoles a los viajeros las particularidades de quesos gallegos con denominación de origen, acompañados de vino de Betanzos, chorizos de carne de cerdo ecológicos y pan de trigo de Vilalba. Los cruceristas asisten a la elaboración de un queso. Con una degustación de todos estos productos, el establecimiento se torna en tradicional furancho, en el que la música no deja de acompañar a los presentes, esta vez con un Juan Ruibal que muestra su destreza con el acordeón.

La agenda de este gaiteiro de crucero está completa. Entre mayo y noviembre este vecino tiene 23 reservas para atender a aquellos que viajan en barco hasta el puerto de A Coruña y en algunas ocasiones también al de Ferrol.

"Creemos que somos únicos haciendo algo así", explica este músico, que apunta que cada vez los cruceristas contratan más esta experiencia antes de bajarse del barco. Cuando se le pregunta por la barrera idiomática, explica que normalmente estos viajeros llegan con intérprete. Sin embargo, apunta que la lengua no es obstáculo. "Mi gran función es que soy capaz de hacerlos reír y de que lo pasen bien sin dar palabra", relata el músico.

Juan Ruibal recibe también una vez al año a una comitiva formada por representantes de prensa extranjera, principalmente de medios alemanes, ingleses, canadienses y japoneses. "A veces ya llegan preguntando por el gaiteiro", afirma.

Este músico de A Estrada se convierte en anfitrión para muchos de los cruceristas que hacen escala en estos puertos gallegos. Indica que el paquete concluye con la entrega de una taza de recuerdo de Betanzos. A mayores, estos viajeros se pueden llevar una estampa para disfrutar con muchos sentidos. Al sabor que encontrarán en productos típicos de Galicia se suma la imagen de algunos de sus rincones y la banda sonora que interpreta este gaiteiro estradense.

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