El delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, José Manuel Cores Tourís, se desplazó ayer a Vila de Cruces para comprobar el inicio de las obras de refuerzo de los caminos principales de la concentración parcelaria de Duxame-Ínsua-Portodemouros. Tourís estuvo acompañado por el alcalde, Jesús Otero, el edil de Infraestructuras, Manuel Souto, y representantes de la junta local de la concentración.

Las máquinas intervendrán en 38 tramos, que suman una longitud de 18.488 metros. Así, se dará servicio a los nuevos lotes de reemplazo y también a los correspondientes núcleos de población. En 3 de esos caminos se proyecta la construcción de un firme a base de macadán y triple riego bituminoso; en otros 8 se aplicará un bacheo y doble tratamiento superficial, mientras que en los 27 restantes se realizará una mejora del firme a base de zahorra artificial. Además, se mejorará la capacidad de drenaje de las cunetas usando desbrozadora de martillo, motoniveladora y tractor.

Según explicó el delegado territorial, estos trabajos permitirán mejorar la capacidad portante y la resistencia de los caminos principales, facilitando así el acceso a diferentes puntos de las parroquias. Recordó que los deterioros que presentan estas vías se deben al paso continuado de vehículos y de maquinaria agrícola, así como a las aguas de escorrentía y a otros factores propios del paso del tiempo. Quiso incidir, también, en la importancia económica que supone la concentración parcelaria, y recordó que "el objetivo último de la Xunta radica en sacar rentabilidad a los terrenos a través de nuevas explotaciones que eviten el abandono de la tierra y la racionalización de la producción". Cores Tourís, en relación a Vila de Cruces, indica que el proceso parcelario registró importantes avances desde el año 2009. En el ejercicio siguiente se finalizó la concentración de Camanzo, Gres y Añobre. La reordenación de las fincas en Camanzo benefició a 777 propietarios y afectó a 880 hectáreas, mientras que en Gres se realizó sobre 189 hectáreas propiedad de otros 196 vecinos. Por último, la parcelaria en Añobre actuó sobre 305 hectáreas y benefició a 319 dueños.

Por su parte, el alcalde Jesús Otero agradeció la implicación de la Xunta en la ejecución de la parcelaria de Duxame-Ínsua-Portodemouros, y recordó que en este proceso están incluidos 566 propietarios y 1.197 hectáreas. Se prevé que las 10.809 fincas iniciales queden reducidas a 1.275. En Vila de Cruces también se encuentra abierta la concentración que afecta a Brandariz y Obra.