Técnicos de la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural se desplazaron ayer a la capital dezana para evaluar el yacimiento arqueológico descubierto recientemente por el investigador y cronista lalinense Daniel González Alén. El yacimiento, localizado en la parroquia lalinense de Moimenta, está compuesto por tres grupos de petroglifos así como por lo que podría catalogarse como un altar rupestre, aunque los expertos no quisieron, por el momento, aventurarse en concretar la catalogación de estos restos. Si bien, los investigadores certificaron que se trata de un yacimiento de origen prehistórico. Además, una vez en el lugar y atendiendo a la disposición de los grupos de símbolos hallados no descartan que se puedan producir nuevos hallazgos en el conocido como Monte da Costa, cubierto por abundante vegetación en la actualidad.
Durante este primer examen de la zona, los expertos, entre los que se encontraba el director del Parque Arqueológico de Campo Lameiro, José Manuel Rey, realizaron fotografías del estado actual del conjuntos que acompañarán con su informe. Las conclusiones de este estudio podrían confirmar la apuesta del descubridor de los restos arqueológicos, González Alén, de que se trata de uno de los yacimientos más destacados de la zona, al reunir tal volumen de restos en apenas una hectárea de superficie.
En la jornada de ayer, los técnicos de Patrimonio también aprovecharon para evaluar el estado de la losa de la mámoa de Campo Malato, en Goiás, Lalín. Una piedra, movida en los últimos días lo que causó la alerta de grupos expertos. Los técnicos constataron la singularidad de la losa al contar por una cara con cazoletas y por otra con formas serpentinatas. También abogaron por un traslado de los restos para garantizar su conservación.
