En su programa electoral, el PSOE de Silleda incluía la centralización de los servicios municipales en un único edificio, de modo que propone el traslado del actual concello y los despachos que se ubican fuera de la casona a las dependencias de la Casa de Cultura, siempre y cuando exista un amplio consenso popular en ese sentido. Por este motivo, y en caso de que la idea llegue a materializarse, es necesario buscar cuál sería la nueva sede de las prestaciones que ofrece la Casa de Cultura, y entre las que se encuentra la biblioteca.

El alcalde, Manuel Cuiña, señala que "de fraguarse el traslado del concello a la Casa de Cultura, éste afectaría a todo el inmueble" de la rúa Progreso y, por tanto también a la biblioteca. Cuiña admite que en conversaciones informales se postuló la posibilidad de que la biblioteca se reubicase o bien en las actuales oficinas de urbanismo -próximas a la sede del PSOE trasdezano, en la calle Alfonso Trabazo- o en el que pasaría a ser, entonces, el antiguo consistorio. Cuiña insiste en que la biblioteca "es un espacio muy importante" y con un gran dinamismo a lo largo de prácticamente todo el año. Por eso precisa unas instalaciones amplias, tanto para la consulta de fondos como para acoger actividades como el encuentro con autores o las reuniones periódicas del club de lectura.

En cualquier caso, desde la Alcaldía Manuel Cuíña insiste en que, como se indicó durante la campaña electoral, la reubicación del concello se hará solo si existe un amplio consenso social. Por tanto, antes de decidir cualquier traslado, el gobierno local realizará un referéndum parroquia por parroquia, para discernir si la Casa de Cultura se adapta a las expectativas de los vecinos y a las necesidades que planteen.

Cabe decir que uno de los motivos por los que interesa este cambio, al margen de que así estarán físicamente juntos todos los servicios del consistorio, es la accesibilidad del edificio y su situación en el centro de la villa, y no al pie de la N-525 y en una curva pronunciada, como está el actual consistorio, con el consiguiente riesgo de seguridad vial. En este sentido, a la Casa de Cultura se la dotó el mes pasado de una nueva caldera de calefacción y a medio plazo se le instalará un ascensor, por un importe de 61.000 euros y con cargo al Plan de Obras e Servizos (POS) 2015.

Ascensor

Hay que recordar que el ascensor es una reivindicación casi histórica tanto de los vecinos trasdezanos como de los partidos de la oposición, ya que en la actualidad las personas con discapacidad no pueden acceder al interior del recinto y presenciar sus diversas actividades lúdicas. Ya en 2012, hace tres años, la administración provincial destinó a esta obra 31.000 euros dentro del Plan de Investimentos da Deputación (PID). La obra llegó a licitarse, pero no se presentó ninguna empresa a concurso. El concello pudo recuperar ese dinero. Ahora, será Endenor la que en próximos días instale el elevador en la fachada trasera del inmueble, obligando así a realizar las obras mínimas de adecuación del inmueble.