El Concello de Lalín está obligado a acometer mejoras en varias depuradoras. Un informe elaborado por la concesionaria del servicio, Espina y Delfín, constata múltiples deficiencias en estas infraestructuras que se deben al paso del tiempo, una deficiente conservación o su actualización a la normativa de la Xunta. Al tiempo el grupo de gobierno pretende extender el saneamiento a parroquias como Zobra o mejorar en otras y para ello está pensando en un modelo más sostenible y eficaz.

Para conocer de primera mano el funcionamiento de nuevas depuradoras el alcalde, Rafael Cuiña, y la concejala de Medio Ambiente, Celia Alonso, se desplazaron ayer hasta la localidad pontevedresa de A Cañiza. Técnicos de la empresa Ecolagunas explicaron a los representantes municipales los métodos que se emplean en unas infraestructuras que, mediante un sistema de lodos y plantas, permite una depuración del agua de alta calidad. Ahora el Concello está estudiando la posibilidad de implantar este modelo de depuradoras en núcleos de las parroquias de Prado o Zobra. Así se daría cumplimiento a las medidas que se van a adoptar para mejorar el estado de conservación y funcionamiento de las depuradoras del municipio con el propósito de garantizar su eficacia ambiental. El grupo de gobierno volvió a recordar la herencia recibida del anterior ejecutivo popular sobre estas infraestructuras, dejando claro que su mal estado provoca que el proceso de tratamiento y vertido no se esté realizando en la actualidad en las condiciones más idóneas.

Según los datos que obran en poder del departamento municipal de Medio Ambiente, las deficiencias incluyen defectos en los equipamientos o malos accesos, así como la entrada de aguas pluviales y tuberías con desperfectos. En concreto, destaca el ejecutivo local en relación al informe de Espina y Delfín, existen una docena de fosas que carecen de cierre o lo tienen deteriorado. Dos precisan barandillas de seguridad, cuatro depuradoras en las que el camión no puede entrar en época de lluvias y otras cuatro en las que es imposible durante todo el año. Asimismo existen cuatro fosas que carecen de una arqueta de muestras, otras tantas precisan un cambio de tapas, dos están con tuberías rotas o descubiertas, dos a las que llegan vertidos de purines y otras tres a las que accede gran cantidad de aguas pluviales y otros materiales como arena.