Dos vecinas de Soutelo de Montes -una madre y su hija- fueron trasladadas en la noche del martes hasta el Complejo Hospitalario de Pontevedra afectadas por una intoxicación por monóxido de carbono causada por la mala combustión de una estufa de butano. Según pudo confirmar esta Redacción, en la tarde de ayer las dos se encontraban ya a salvo en su residencia.

Con el susto todavía en el cuerpo, José Antonio Casal, marido y padre de las intoxicadas, relató que al anochecer decidieron encender la estufa mientras la menor estudiaba. En ese momento en la vivienda familiar se encontraban cuatro personas: el matrimonio, su hija y la abuela de esta. El padre se había retirado ya a descansar en su habitación cuando se despertó por la voz alarmada de su suegra. Explicó que la niña lloraba desde su habitación porque no era capaz de levantarse y su mujer estaba en el salón sin conocimiento.

José Antonio Casal se dio cuenta rápidamente de que la estufa podría ser la causante de esta situación, de manera que condujo a su hija hasta la ventana para que respirase aire puro mientras intentaba también despertar a su mujer.

Este vecino de Soutelo indica que las puertas del salón -donde se encontraba encendida la estufa- y de la habitación de la menor se encontraban abiertas, de manera que todo le lleva a pensar que el gas pudiese desplazarse de una estancia a otra. Según sus explicaciones, tanto la puerta de su habitación como la de la estancia en la que se encontraba su suegra estaban cerradas, de ahí que ninguno de los dos evidenciase síntomas de intoxicación.

El suceso se produjo en el número 31 de la Rúa C, en la citada localidad forcaricense. Hasta allí se desplazaron numerosos efectivos, después de que la alarma saltase pasadas las 23.00 horas. El 061 movilizó al punto una ambulancia asistencia para atender a la menor y a su madre -de 39 años y que responde a las iniciales M.C.V-, que recuperó la consciencia antes de ser trasladada hasta el Hospital de Montecelo. Su hija ingresó en el Hospital Provincial. Ambas fueron dadas de alta ayer por la mañana.

Hasta el lugar también se desplazaron efectivos del parque intercomarcal de bomberos Deza-Tabeirós-Terra de Montes. Cuando llegaron estos profesionales las dos personas intoxicadas ya estaban recibiendo asistencia. Los bomberos se adentraron en la vivienda para realizar las comprobaciones oportunas, midiendo los niveles de monóxido de carbono presentes en la misma. Iniciaron labores de ventilación y abandonaron las dependencias tras haber comprobado que no quedaba monóxido de carbono en las estancias del inmueble. Cabe recordar que este gas es inodoro, incoloro e insípido, de manera que las personas que se intoxican con él no lo perciben hasta que se comienzan a encontrar mal.

En el lugar del suceso se personaron también agentes de la Guardia Civil. La noticia suscitó ayer la preocupación de vecinos de Soutelo de Montes, que se interesaron por el estado de las dos afectadas. José Antonio Casal indicó ayer que la estufa causante de esta intoxicación ya fue retirada de la vivienda por los efectivos de seguridad. Reconoció que, después de lo sucedido, no volverá al hogar.