El colectivo Dzine celebró ayer una asamblea general en el Casino de Lalín para informar a los socios de las últimas actividades llevadas a cabo y poner en marcha nuevas iniciativas. Entre los puntos a tratar estaba la creación de equipos de trabajo que dinamicen la participación de los miembros del grupo y repartan la carga de trabajo más allá de la directiva. Se planteó la creación de grupos especializados en distintas áreas que centrarán sus esfuerzos, por ejemplo, en la captación de socios y locales colaboradores o en la selección del material audiovisual que se proyectará. Se precisó, también, la necesidad de constituir una sección centrada en dar soporte técnico para las proyecciones. Así, sería un gabinete que debería contar con nociones de audio y video.
Otra de las cuestiones a abordar fue la planificación de la programación que se llevará a cabo durante los meses de verano. El colectivo ya inició las actividades con la proyección de un trabajo de animación el pasado domingo en Rodeiro. En su horizonte se dibujan otras citas como la participación en la Algarabía en la capital dezana o la posibilidad de organizar pases en el poblado minero de Fontao, en Vila de Cruces. El colectivo ya mantuvo una primera reunión con los vecinos y se barajó incluso la posibilidad de celebrar una proyección coincidiendo con la celebración de los festejos patronales del lugar.
La necesidad de contar con un equipo de proyección que supla las necesidades del colectivo fue otro de los temas a abordar. En referencia a esta cuestión, desde el colectivo se mantienen a la espera de los resultados que les ofrezca la reunión celebrada en los días pasados con el regidor lalinense, José Crespo. En esta asamblea el colectivo ya obtuvo la cesión de uso del Salón Teatro como sede y aprovechó para presentar una propuesta para optar a una subvención que sufrague los gastos de adquisición del equipo de proyección necesario para llevar a cabo su labor. Se trata de una solicitud que el propio Concello debe tramitar y para la que el colectivo aportó distintos presupuestos para poder optar a la concesión de la misma.
El colectivo, tras casi dos meses de rodadura, cuenta con más de 60 socios e incrementa su número día a día, según informan desde la directiva. Además, incorporan la figura de socios colaboradores, con más de ocho miembros en la capital dezana en esta categoría. Se trata de locales que se convierten en nexos de unión entre el colectivo y los socios. Su función se centra en colaborar en las actividades y la difusión de éstas a la par que el colectivo ofrece publicidad de las entidades colaboradoras en sus proyecciones. El colectivo insta a los vecinos a colaborar con la iniciativa para sacar adelante un proyecto basado en la pasión por mantener el cine en la villa.
