Esta semana el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, respondía en una entrevista radiofónica al ser preguntado por la discriminación salarial de las mujeres con un "no nos metamos en eso". Aunque al jefe del Ejecutivo español no le apetezca hablar de la desigualdad entre hombres y mujeres, hay colectivos y otras administraciones que están trabajando para acabar con esta lacra. Es el caso del Concello de Vilagarcía, que aporta su grano de arena al acoger una nueva edición del Programa Clara que desarrolla el Instituto de la Mujer. Las 25 participantes recibieron ayer sus diplomas en el consistorio vilagarciano de la mano de la concejala de Igualdade, Tania García Sanmartín.
Esta iniciativa del Instituto de la Mujer está dirigida a colectivos de mujeres con una difícil inserción laboral o en situación de vulnerabilidad: víctimas de violencia de género, inmigrantes, reclusas, paradas sin titulación, mayores de 45 años, mujeres con discapacidad, jóvenes sin titulación o responsables de núcleos familiares.
Pero el programa Clara no solo persigue que sus alumnas encuentren un empleo, sino que va mucho más allá. "Lo más importante es que nos enseña a las mujeres a valorarnos; a veces necesitamos un empujoncito. Espero que de aquí en adelante veáis la vida de otra forma con un "aquí estoy yo y voy a poder", porque valéis mucho". Son palabras de la representante del Instituto de la Mujer que ayer conoció a las participantes en el programa Clara desarrollado en Vilagarcía.
Ángeles Larrañaga se mostró consciente de las "dificultades" actuales en el mercado de trabajo, si bien invitó a las allí presentes a no tirar la toalla por hacerse un hueco en él. De hecho "algunas" de las alumnas ya han logrado emplearse en las empresas en la que han realizado las prácticas. Precisamente por este motivo no pudieron acudir ayer a Ravella a recoger sus respectivos diplomas.
Empleo para más autonomía
La técnico de Tragsa (empresa que impartió el curso), Ainhoa Cortés, agradeció la puesta en marcha "de este tipo de iniciativas" en un país con "una pobreza alarmante" en el que "el empleo es la forma de empoderarnos y de tener autonomía". Cortés aprovechó para solicitar al Concello no solo la puesta en marcha de más ediciones del programa Clara, sino también de tener en cuenta la posibilidad de realizar una seguimiento de las mujeres que participan en este ciclo.
La concejala de Igualdad, Tania García, cogió el guante y mostró total disponibilidad para que Vilagarcía continúe acogiendo sucesivas ediciones del programa Clara. "Si el Instituto de la Mujer quiere repetir, aquí estamos", afirmó la edil socialista, quien recalcó que las mujeres "somos las más perjudicadas, con mayores tasas de desempleo y menos salarios que los hombres".
En esta última edición del Programa Clara las mujeres se formaron como auxiliares de comercio y reponedoras, y como auxiliares de almacén. La formación duró nueve meses, desde abril a finales de noviembre.
La actividad se divide en varias fases y se orienta a la mejora de la empleabilidad y participación social de mujeres en situación de vulnerabilidad grave, es decir, que no tienen la oportunidad de conseguir un trabajo en igualdad de condiciones que otras personas.
En la primera fase se trabaja el desarrollo personal: autoestima, motivación, seguridad y confianza, todos ellos elementos necesarios para enfocar mejor la búsqueda de empleo. Se organizan sesiones grupales.
La segunda etapa se dedica a la información y orientación para la definición del perfil profesional, teniendo en cuenta que son mujeres que llevan fuera del mercado laboral mucho tiempo o que nunca han accedido a él. También se analizan los nichos de empleo en Vilagarcía.
La tercera fase, la más larga, es la de formación para el empleo. En este caso se proporcionaron contenidos en materia de alfabetización digital y manipulación de alimentos, entre otros. La consultora KM y la Academia Elisa fueron las empresas colaboradoras.
Por último, se establece una fase de búsqueda de empleo y acompañamiento en la inserción real, en la que aprenden, entre oras cosas, a enfrentarse a entrevistas de trabajo.
