La exalcaldesa de Ribadumia señalaba a las zonas del rural de Ribadumia como las que estaban viéndose más afectadas por lo que estaba ocurriendo. Así, recordaba que "una vivienda en Barrantes, que consume 180 metros cúbicos, pagaría 20 euros, pero ahora pasará a abonar 90", pero en el rural, los conservadores tienen constancia de que hay viviendas, en las que se utilizaba el agua para regar, que han pasado "de abonar 600 euros a pagar entre 2.600 y 3.000, quintuplicando el coste de este servicio por la negligencia cometida por el grupo de gobierno".