"Galicia docemente está ollando o mar: ¡ten vales e montanas e terras para labrar! Ten portos, mariñeiros, cidades e labregos ¡cargados de traballo, cargados de trafegos!". Poniendo voz a este poema del libro "Os soños na gaiola", Xosé Castro Ratón dio el pistoletazo de salida a la lectura pública de textos de Manuel María que ayer se celebró en la cafetería Ravella como homenaje al autor protagonista de las Letras Galegas de 2016. Coincidiendo con el Día Internacional del Libro y de los derechos de autor y al abrigo de la Fundación que lleva el nombre del "poeta del Miño", cerca de una veintena de vilagarcianos se reunieron para ensalzar su obra literaria, caracterizada por la identidad, la sensibilidad y el compromiso social. La iniciativa, denominada "Manuel María na túa voz", se celebró de forma casi simultánea en diversas localidades de Galicia, animadas por la Federación de Municipios e Provincias. En Vilagarcía fue el exconcejal de Cultura, Xosé Castro Ratón, el organizador. No en vano mantuvo una estrecha relación con el poeta. "Para muchos de nosotros Manolo fue un amigo. Tuvimos la suerte de compartir con él muchos aspectos de la vida", antes de su fallecimiento en 2004.
Y es que Vilagarcía tiene también un hueco en la biografía del autor lucense. En la capital arousana, concretamente en A Escardia, residió durante años un pariente suyo: el boirense Ramón Fernández Mato, periodista, médico y político liberal que jugó un papel destacado durante la II República. La biblioteca personal de Fernández Mato ejercía de foco de atracción para Manuel María. "Tenía obsesión por rastrear esa biblioteca para que no se perdiera ningún documento de valor", como acabó sucediendo "lamentablemente" tras la muerte del político de Cespón, recuerda Castro Ratón. Participó también Manuel María en "muchas actividades culturales" en Vilagarcía, como el Congreso de Poesía Gallega celebrado en 1997 y en el que participaron "grandes estrellas de nuestra literatura". En clave de curiosidad, decir que el homenajeado este año en el Día das Letras Galegas profesaba especial devoción por el restaurante "Pequeno Bar", emplazado en la Alameda. Era un apasionado de su cocina y también "de un vino Paternina que en los años 60 y 70 era un mito y gran emblema" de la Denominación de Origen Rioja. "Manuel María, ese vino y el Pequeno Bar hacían un triángulo de amor inmenso", recuerda con sorna Xosé Castro Ratón. "Mucha gente en Vilagarcía tuvo relación con él. Además, murió hace tan solo 12 años y todavía está fresco en la memoria".
Legado literario
Letras Galegas y Día del Libro. Esa fue la unión que representó la lectura pública de ayer. "Desde Galicia y con Manuel María como protagonista quisimos conectar las dos conmemoraciones, implicando además a la ciudadanía de forma directa en este acto para poner, con su voz, un plus de emoción y corazón" al legado literario de uno de los escritores gallegos que más número de libros publicó en vida. Siendo la poesía su género preferido y por el que más se le conoce, también hizo incursiones en el teatro, el ensayo o la narrativa.
