El conservador Francisco José Millán Mon es uno de los europarlamentarios que más han peleado para que la Comisión de Pesca visitara Galicia y pudiera reunirse con los diferentes sectores del mar.
-¿Cuál es su impresión de los encuentros mantenidos y para qué sirve realmente esta visita?
-Es una experiencia enriquecedora y muy importante, ya que Galicia es la principal región pesquera de Europa para la pesca, el marisqueo, la acuicultura y la industria transformadora. Estamos en un momento importante porque empezamos a aplicar la nueva Política Pesquera Común, de ahí que resulte tan importante que los eurodiputados, sobre todo los extranjeros, puedan conocer la realidad de Galicia y su enorme riqueza. Además los tres extranjeros que han venido, que son el presidente y dos vicepresidentes de la Comisión de Pesca, pertenecen al PP europeo, lo cual pone de manifiesto el interés de mi grupo por la pesca en general, y por Galicia en concreto ¿Para qué sirve esto? Pues cada uno sacará sus propias conclusiones de la visita, pero no cabe duda de que en el trabajo legislativo futuro nos vendrá muy bien tener este conocimiento directo de las inquietudes de Galicia, por ejemplo en relación con la pesca en aguas profundas, los descartes o la necesidad de sanear las rías, que dicho sea de paso es un problema que no solo se localiza en España. Sin duda, en nuestro trabajo legislador tendremos muy en cuenta todo lo que aquí se nos está planteado.
-Y así, a bote pronto, ¿cuáles son sus conclusiones más destacadas?
-Son muchas, pero puedo resaltar que los eurodiputados extranjeros están muy impresionados con el trabajo del Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar), con Covadonga Salgado como directora. En este mismo contexto debo destacar que la Comisión do Mexillón aludió en su reunión con nosotros a la necesidad de controlar más y mejor la importaciones desde países como China, que pueden introducir productos en Europa sin controles sanitarios eficaces. Y no le falta razón.
-Parece lógico ese temor, sobre todo teniendo en cuenta que Galicia parece disponer de los mejores controles del mundo.
-Efectivamente. Aquí en Galicia nos tomamos muy en serio la sanidad pública y el Intecmar desarrolla un trabajo ejemplar. De ahí que una de las quejas del sector sea que los controles en otros países sean menos rigurosos, por eso a veces lanzan alertas sanitarias que hablan de mala calidad de nuestros mejillones a pesar de que se trata de alertas injustificadas. Hay que buscar controles homogéneos en toda Europa y lograr que las alertas sanitarias se lancen solo con garantías y cuando hay motivos reales. Repito que el Intecmar es un centro magnífico que controla nuestros mares y productos, y los eurodiputados extranjeros han podido constatar la seriedad de estos controles. Debo decir que no solo los productores de mejillón, sino el conjunto del sector pesquero gallego, quieren hacer frente a la competencia que ejercen esos productos que vienen de fuera y no han sido sometidos a controles serios, y es una aspiración totalmente legítima que debemos arropar. No cabe duda de que seguimos importando mucha pesca de fuera y tiene que haber homogeneidad en los controles que los 28 países miembros hacemos de esos productos importados cuya calidad, a veces, deja mucho que desear.
