En un anterior artículo opinaba que, a cuarenta días de cumplirse dos años de la firma de la coalición de gobierno cuatripartito, las obras de remodelación de la Avda. Luis Rocafort podían, y debían ser, políticamente hablando, el punto de inflexión que pusiese blanco sobre negro la verdadera capacidad del grupo de gobierno.
Pues bien, lo fueron. Las obras de la Avda. Luis Rocafort fueron el punto de inflexión a partir del cual todo el que quiso dar su versión de lo acontecido lo hizo, y también, todo el que quiso, actuó en consecuencia.
Y es que en política, al igual que en otros aspectos de la vida, hay que prever la posible repercusión de lo que se dice, y como se dice, pero, sobre todo, de lo que se hace y como se hace. Y los hechos hace ya mucho tiempo que dejaron entrever la actual situación política municipal.
Sin ir más lejos, a lo largo de los últimos días se han realizado todo tipo de valoraciones, insinuaciones, opiniones, comentarios, críticas? acerca del nuevo pacto, pero apenas nada sobre las causas que motivaban la anunciada dimisión del ya ex-Alcalde.
Y mira por donde, resulta que era el hecho clave de todo el revuelo político de los últimos días, pues con esa decisión personal -la de dimitir- que solo a él competía adoptar, se retrotraía nuevamente la elección de Alcalde-Presidente de la Corporación al 13 de junio de dos años atrás, cuando SOLO, al igual que ahora, el único pacto posible en su contra, el cuatripartito, impidiera ya entonces la proclamación de Telmo Martín como Alcalde.
Así pues, lo que viene sucediendo en Sanxenxo no es una moción de censura encubierta (¿...?), ni un acto de transfuguismo (!...¡), ni rebuscadas definiciones por el estilo con las que tratar de afrontar un revés político. Es, simple y llanamente, un nuevo pacto de gobierno, suscrito esta vez por los dos partidos más votados en las pasadas elecciones municipales.
Juntos suman 5.591 votos, el 62,02% de los emitidos hace ahora dos años, lo que representa casi diez puntos porcentuales más que los 4.755 que sumaba el cuatripartito (52,75%). Así las cosas, está claro que tanto uno como otro pacto gozan de plena legitimidad democrática.
La valoración, tanto de uno como de otro, por parte del conjunto de los vecinos de Sanxenxo, la real, se pondrá de manifiesto dentro de dos años? en las urnas.
*Exconcejal del PP
