Para el viernes tienen anunciada su asistencia al mitin de apertura de la campaña electoral, el presidente de la Xunta y la ministra de Fomento. Naturalmente vienen con la sana intención de pedir nuestro apoyo para estas nuevas elecciones, es decir para pedirnos nuestro voto para poder seguir gobernando; es parte de su trabajo, dar a conocer lo que hicieron y lo que pretenden hacer para conseguir una recuperación palpable y una mejor calidad de vida para todos. Pero creemos que antes de pedir el voto, es necesario saldar las deudas, y así lo entendemos nosotros, a pesar de que comprendemos las dificultades que entorpecen e impiden el cumplimiento de las promesas o la ejecución de lo que se considera de justicia. Pero lo que es cierto es que hay que resolver los problemas planteados para saldar las deudas que tienen pendientes las administraciones, sin que a nuestro entender exista alguna justificación para ello.
Nos referimos a las deudas que las administraciones autonómica y central, tienen contraídas con Marín. No vamos a recordar los logros conseguidos, porque entendemos que son necesidades de todos los marinenses, y las administraciones deben cumplir con justicia y equidad para satisfacer estas necesidades de los ciudadanos. Lo cierto es que llevamos muchos años, demasiados, a la espera de que la reivindicación más justa y decisiva para nuestro presente y futuro, se cumpla de una vez. Nos referimos a la titularidad total y completa de nuestro puerto, patrimonio irrenunciable de ayer, hoy y mañana. Por eso pedimos al Presidente de la Xunta que saque del cajón del olvido, y desempolve el expediente de fijación de los límites portuarios, porque no hay nada más que esperar pues el acuerdo intermunicipal no es posible, por lo que la Xunta tiene la obligación de tomar una decisión justa para que los terrenos ganados al mar, por y para el puerto de Marín, sean incluidos en nuestro municipio, y así se acaben muchos años de incertidumbre y de dejadez administrativa.
Y a la ministra de Fomento que no se olvide que Marín y el Morrazo están comunicados con la capital por una autovía que por una incomprensible decisión del anterior ministro, fue destruida y convertida en un "caminito de belén" y salpicada de "lombos", que dificultan nuestros desplazamientos poniendo en peligro la vida de los trasladados en ambulancias y arruinan nuestros vehículos, sin que existan razones objetivas para ello. Por eso reiteramos nuestra petición de que aprovechando la construcción del paseo de Mollabao-Placeres, incluya en el mismo la recuperación total de la autovía, devolviéndola a su estado anterior, que nunca debió modificarse.
Por eso empiecen por saldar las deudas, y después prometan y cumplan lo que quieran, porque Marín tiene carencias de todo tipo, por eso lo que hagan será bienvenido. Los marinenses se lo agradeceremos.
