Aquellos viajes maragatos

Hace unos días, en Semana Santa, a mi teléfono llegó un correo que me dejó los dientes largos. “Ahora -decía- como sólo te acuerdas de tu amigo Jaime y de tu nueva tierra del Val Miñor te olvidas de tus raíces. Pues no nosotros, que estamos disfrutando de un lechazo glorioso en el mejor cocinero de la maragatería, en Casa Juan Andrés y a la salud de Valentín”. No firmaba pero el estilo era inconfundible, al igual que lo delataba el lugar cuya comida invocaba, sito en ese hermoso pueblo junto a Astorga que es Castrillo de los Polvazares: ¡Manuel Alvite! ¡Cuántas veces hemos hecho un viaje romero a la Maragatería invitados por él todo un autobús de vigueses, desde Enrique Veiga a Salvador Fernández, Jorge Trigás, Enrique Acuña, Emilio García, Wenceslao C. Polo, Javier Pedrido.... ¿Recordáis de esa película, La Grande Bouffe, en que cuatro personajes (Marcello Mastronianni, Ugo Tognazzi, Michel Piccoli y Philippe Noiret) se reúnen un fin de semana para realizar un placentero suicidio gastronómico colectivo? Nosotros a la par de ellos, sin tregua, desayuno, comida y cena pero con ricas viandas maragatas. No veo ahora casi nada a Alvite, que me tiene olvidado. Pena, porque yo con Alvite aprendí mucho del quién es quién en Vigo, sobre todo de ese mundo lleno de humanidad que es la hostelería, la popular más que nada. Ahora no nos vemos. Menos mal que me escribe...

Jabalí que te vi

“A Cerdedo vin/ comer xabarín/ cousa máis sabrosa/ na vida comín”, dice la letra compuesta por las Cantareiras do Barro de Arén refiriéndose a esta preciada pieza de caza. Claro, hay muchos modos de prepararlo, por ejemplo asado con castañas, o guisado con patatas y champiñones, o el jabalí a la manzana o la pierna de jabato asada al aguardiente y a las finas hierbas, como probaron los vecinos de este pueblo hace poco. De eso nos van a contar y cantar en Vigo hoy con una degustación en hotel pazo Los Escudos. Se hace la boca agua.

Una editorial “outsider”

Una editorial independiente, de funcionamiento asambleario y abierto que nació con el objetivo de abrir nuevos caminos dentro del sistema literario gallego como alternativa al circuito oficial y al pensamiento subsidiado. Por ahí va la editorial gallega y en gallego Estaleiro, que aprovecha las ventajas de autoedición que permite la red y os lo cuento porque será quien hoy presente (20 h.) en ele café UF (c/Placer), al calor del Utopía Foro que allí se reúne, la colección de Pensamento Contemporáneo “Materiais e Ferramentas Comúns”.