Esto es Pecado de Reyes

Yo la veía pasar una y otra vez por el barrio viejo y, si mis ojos se iban tras su belleza, debo reconocer que ella siempre caminaba rauda, sin mirar a izquierda ni derecha salvo que hubiera un cliente hostelero en el camino. Siempre a su aire, aprisa, como sólo atenta a su trabajo. Quiso el azar que conociera a Rosana Souto Castro y advirtiera al poco, tras sentir su aroma a Eternity de Klein, que detrás de esta mujer se hallaba una muy seria, competitiva y apasionada comercial del vino, con 7 años vendiéndolo en los mejores lugares. Pero ahora, tras esos años como directora comercial de una bodega gallega, rotos muchos tacones de tanto visitar clientes, Rosana se independiza y da el salto a un proyecto propio respaldado por un vino que a ella le encanta (y también a Parker, que ha dado 98 puntos a alguna de sus cosechas): el Vallovera Rioja, con sus bodegas en La Guardia.Allí se fue por su cuenta y riesgo con un proyecto personal que era su reto, su propia ilusión en juego, aquello por lo que merecería la pena pelear porque tendría mucho de sí misma: y volvió con el visto bueno de la dirección de esta bodega. Esta trabajadora tenaz y eficaz relaciones públicas compra de ese vino y le da su propia imagen, su etiqueta, un nombre que seduce: Pecado de Reyes. Ahora, a colocarlo aunque... en parte ya lo tiene. Rosana me recuerda a otras tres mujeres viguesas que pelean en el vino con pasión laboral: Pilar Fernández, Lourdes Bragado y Elena Piñeiro.

No echen a Indi, hombre

"El indi" lleva 7 años viviendo alquilado en la calle Pobladores y acaba de recibir un burofax: quieren echarlo. Según vecinos tiene todos los pagos del alquiler al día, con sus recibos? y es todo un personaje, marcado por un pasado duro del que ha salido, amable, siempre con sus tallas de madera y su perro "Indi", como nos llama a todos, pues para él todos somos individuos. No echen a Indi, hombre.

De Galicia en Lisboa

Recibo un hermoso libro, fruto de un trabajo largo y denodado y que abre la puerta a un mundo importante y hasta ahora poco conocido: el de la abundosa emigración gallega a Lisboa. Presentado en edición de lujo con muy cuidados diseño e ilustraciones, el cineasta Xan Leira ha levantado un sorprendente yacimiento histórico de nuestra memoria gallega en portugal. En su editorial, Acuarela Comunicación, ha publicado "Historia dunha emigración difusa. 500 años de emigración galega á Lisboa". Y, tras varios artículos, en ella aparecen 70 historias personales y cientos de fotografías antiguas y de producción propia. Me gusta y sorprende ese libro de Xan Leira, hijo de emigrante retornado (Vigo-Argentina-Vigo), como su hermano Lois Pérez Leira, escritor feraz sobre emigración y dirigente sindical, o su hermana Susana, que tiene los superbocatas de La Perrera.