El mundo conmemoró ayer el quinto aniversario del inicio de la guerra civil siria -un conflicto que ha causado entre 275.000 y 500.000 muertos-, en un ambiente marcado por el mantenimiento de la tregua establecida el pasado 27 de febrero, el arranque el lunes de las negociaciones de paz de Ginebra y los primeros pasos, ayer mismo, del repliegue parcial del contingente aéreo ruso.

Varias manifestaciones se produjeron en distintas áreas sirias bajo control opositor. Los participantes pidieron libertad y la caída del régimen de Bachar al Asad, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Las marchas se desarrollaron en áreas rebeldes de la ciudad de Alepo, la mayor del norte del país, así como en el pueblo de Sayu, en la misma provincia y próximo a la frontera con Turquía. También hubo protestas en las localidades de Saraqeb y Maarat al Nuaman, en la provincia de Idleb.

En esta última ciudad hubo varios heridos después de que milicianos del Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda, abrieran fuego contra los manifestantes, que portaban banderas de la revolución siria y de la insurgente División 13, entrenada por EE UU.

El quinto aniversario del comienzo de la contienda coincidió con el inicio de la retirada por parte de Rusia, aliada del Gobierno de Damasco, del grueso de las fuerzas aéreas que desplegó en septiembre pasado en la base siria de Hamimim, en la provincia costera de Latakia. Tal y como ordenó el lunes el presidente ruso, Vladimir Putin, el primer grupo de aviones -un aparato de transporte y varios bombarderos Su-34- regresó ayer a Rusia.

La medida ha sido acogida con cautela por las potencias occidentales. El jefe de gabinete de la Presidencia rusa, Serguei Ivanov, advirtió que el repliegue no significa que Rusia vaya a disminuir la intensidad de su lucha contra el terrorismo en el país árabe. La retirada parcial rusa ha sido interpretada como un signo de que Moscú ha conseguido robustecer al régimen de Asad, así como un gesto hacia las negociaciones de Ginebra y una señal al propio Asad para que se muestre dialogante.

En Ginebra, los representantes de la oposición que participan en las negociaciones de paz anunciaron que están dispuestos a mantener conversaciones directas con el Gobierno de Damasco. La delegación opositora anunció también la presentación de un documento de doce puntos que, desde su perspectiva, deben figurar en la agenda negociadora. El lunes, el régimen de Damasco entregó su lista de prioridades.