El gobierno estadounidense reiteró su preocupación porque la "vaguedad" de la nueva ley antiterrorista de China puede llevar a "mayores restricciones" en el ejercicio de la libertad de prensa y reunión pacífica en el país. "Estados Unidos sigue preocupado ya que las provisiones y definiciones amplias y vagas en esta ley, podrían llevar a mayores restricciones en el ejercicio de la libertad de expresión, asociación, reunión pacífica y religión dentro de China", afirmó Mark Toner, portavoz adjunto del Departamento de Estado.