Las elecciones parlamentarias de Hungría terminaron este domingo con la esperada victoria del primer ministro, el conservador nacionalista Viktor Orbán, con el 46 por ciento de los votos, según indican los primeros datos oficiales.

Con el 45 por ciento de los votos escrutados, el partido gobernante Fidesz se impuso por delante del bloque opositor de izquierdas, liderado por los socialistas, con un 24 por ciento, y el extremista de derechas Jobbik, con el 21,5 por ciento.

Los ecologistas del LMP están, por ahora en el 4,5 por ciento, con lo que no entrarían en el Parlamento de Budapest al no superar el umbral mínimo del 5 por ciento.

De acuerdo a una nueva ley electoral, el número de escaños en el Parlamento de Budapest baja de 386 hasta 199, y que las elecciones se realizan en una sola vuelta.

En las 106 circunscripciones se presentarán más de 1.700 candidatos en representación de 84 listas, mientras que los restantes 93 escaños se repartirán según el apoyo que los partidos reciben del segundo voto, emitido a una de las 18 listas nacionales.

De confirmarse estos resultados, el Fidesz corre peligro de perder la mayoría de dos tercios de los escaños en el Parlamento, aseguró el analista Zoltán Somogyi en la televisión privada ATV.

En algunas circunscripciones de provincias del este del país, el Jobbik se colocó incluso por delante del bloque de izquierdas, que a su vez parece conquistar más de la mitad de las circunscripciones en la capital.

Según datos oficiales de la Oficina Nacional Electoral (NVI) la participación en las elecciones fue del 60,3 por ciento, unos cuatro puntos porcentuales menos que en los comicios de hace cuatro años.

Se espera que la NVI publique los resultados preliminares con el escrutinio del 90 por ciento a las 22:00 GMT.