La secretaria de Estado, Hillary Clinton, afirmó ayer que el régimen castrista “está finalizando” y que EE UU “debe prepararse”, y señaló que el Gobierno respetaría la decisión del Congreso de levantar el embargo. “Este es un régimen que está finalizando. En algún momento terminará y necesitamos estar listos para eso”, dijo Clinton en su primera audiencia como secretaria de Estado ante el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes.

Por otra parte, señaló que si el Congreso decide que lo mejor para los intereses de EE UU es levantar el embargo de 1962, “obviamente la Administración lo respetaría”. Clinton reiteró la postura de Obama de que el Gobierno de La Habana debe tomar medidas hacia la democratización y de que Washington está dispuesto a un diálogo amplio. “Vamos a proceder con cuidado en este proceso, porque sabemos lo que ha pasado antes”, señaló Clinton, al referirse a las acciones que en el pasado ha tomado La Habana para torpedear cualquier apertura con Washington, como sucedió con el derribo de dos aviones de “Hermanos al Rescate” hace 13 años. “Nuestra meta es una democracia independiente que dé al pueblo de Cuba las mismas oportunidades que sus hermanos tienen en este país”, afirmó.

Abusos

Por otra parte, un documento del Senado revela nuevos detalles sobre el proceso que llevó a la autorización de métodos coercitivos en interrogatorios a supuestos miembros de Al Qaeda, en medio de la polémica desatada tras la desclasificación de informes en los que altos cargos de la administración Bush autorizaban esas prácticas.

El informe indica que el abuso de detenidos bajo custodia estadounidense “no puede ser atribuido a acciones de unas pocas manzanas podridas a iniciativa propia”. El hecho es, señala el Congreso, “que altos cargos del Gobierno solicitaron información sobre cómo usar técnicas agresivas y redefinieron la ley para crear la apariencia de legalidad y las autorizaron”.