La carrera por la candidatura presidencial demócrata tiene ya un nuevo estado "crucial", Indiana, que celebra elecciones primarias el próximo 6 de mayo y donde Hillary Clinton vuelve a jugarse el pellejo.

El atributo de elección "crucial" lleva meses revoloteando en el ambiente, sin que ninguna de las contiendas que recibieron ese calificativo lograse ser decisiva, pero con el proceso de primarias aproximándose al final, "ahora sí" podría ser la hora de verdad.

Los asesores de la senadora por Nueva York, que disputa la candidatura presidencial demócrata con el también senador Barak Obama, parecen tenerlo claro.

"Prácticamente todo el mundo en la campaña está de acuerdo en que tenía que ganar en Pensilvania e Indiana", dijo un asesor de Hillary en declaraciones que recogía ayer el diario "The New York Times".

Y no sólo eso, sino que varios de los asesores de la ex primera dama estadounidense aseguraron a ese rotativo, bajo condición de anonimato, que le recomendarán retirarse si no gana en Indiana.

El estado es limítrofe con Illinois, la tierra adoptiva de Obama y por la que es senador, lo que podría jugar a favor de éste, pero tiene también una amplia clase blanca obrera, que favoreció a Hillary en Pensilvania y ha respaldado también a la senadora en otros estados como Ohio.

James McCann, profesor de ciencias políticas de la Universidad Purdue (Indiana), reconoce que la situación está muy reñida.

"Si tuviera que apostar lo haría por Obama, pero no apostaría mucho", bromeó McCann.