La Cooperativa de Armadores de Vigo (ARVI) ha valorado los daños que supondría a nivel económico para la flota de Gran Sol que se consumen los recortes de cuota propuestos por la Comisión Europea el pasado martes. El tijeretazo de Bruselas sobre las tres especies principales en el caladero (merluza, rape y gallo) supondría una pérdida de 25 millones de euros el próximo año.

El Ejecutivo comunitario prevé un escenario que supera incluso el estimado por los científicos del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES, por sus siglas en inglés). Así, apuntaban a una reducción de un 19% del total admisible de captura (TAC) de la merluza, dejando la cuota general en 97.581 toneladas. En el caso del rape, especie con un gran valor, la reducción sería de un 12%, quedando 29.534 toneladas. Por último, el gallo o rapante tendría una cuota de 12.310 toneladas, un 10% menos que este año.

Desde ARVI, además, recuerdan que esta situación es "inaceptable" teniendo en cuenta que, para ellos, tanto el rape como el gallo "son dos stocks que se encuentran en una buena situación". Además, en el segundo caso los armadores colaboran con el Instituto Español de Oceanografía (IEO) en Vigo para recoger y aportar todos los datos necesarios para evaluar la situación de la especie. "Se están haciendo esfuerzos que no se ven compensados en la realidad", indicó el gerente de ARVI, José Antonio Suárez-Llanos.

En concreto, ARVI colabora desde marzo embarcando a científicos con la intención de analizar el potencial reproductivo del gallo, actualizando unos datos que tienen una antigüedad de unas dos décadas o que, simplemente, no existen.

Esta campaña científica se hizo tanto en Gran Solo como en aguas del litoral español, donde Bruselas en cambio propone aumentar la cuota de la especie un 20% (1.387 toneladas). En ese caladero también propone bajar un 30% la de merluza y un 2% la de rape, además de mantener el cupo cero de la cigala, una situación que sigue indignado a los arrastreros gallegos.