La campaña navideña es un pilar fundamental en la economía de los cerca de medio millar de mariscadores del fondo de la ría de Pontevedra. Las expectativas eran muy buenas, debido a los elevados precios que estaba obteniendo el marisco a lo largo de todo el año, y, aunque el balance final es "positivo", existe cierta decepción en los pósitos debido al desplome de los precios que se vivió en la segunda semana de las navidades tras las celebraciones de Nochebuena y Navidad.
Si bien es cierto que las compras se realizan en muchas ocasiones con antelación y que el plato fuerte de las fiestas son los banquetes de los días 24 y 25, el sector marisquero explica que en años anteriores los precios se solían mantener una semana o dos más gracias a la demanda de Nochevieja y Reyes. Este año la diferencia de precios que se han pagado en las lonjas entre estos dos periodos ha sido abismal.
Las cifras de ventas y cotizaciones de venta en lonja que ofrece la Xunta de Galicia confirman que hubo un cambio de tendencia significativo después de Nochebuena y Navidad y el tirón no se mantuvo en las dos semanas siguientes de celebraciones festivas.
Así, por ejemplo, en el periodo de 15 días que discurre entre el 10 y el 25 de diciembre la lonja de Campelo subastó 47 toneladas de producto, en su casi totalidad marisco, facturando solo en estas dos semanas 520.000 euros.
En las otras dos semanas que discurrieron entre el día 26 y el día de Reyes se subastaron únicamente 26 toneladas de producto que supusieron 212.000 euros de facturación. El desplome de los precios fue significativo: Según este mismo portal, entre el 10 y el 25 de diciembre el precio medio en la subasta de almeja fina llegó a los 38 euros, mientras que en la segunda mitad de las navidades este se situó en unos 25 euros para el bivalvo más codiciado de la ría d Pontevedra. Un molusco que, además, cada vez es más difícil encontrar. Es decir, el precio cayó de una semana para otra en un 34%.
Lo mismo ocurrió con la almeja japónica, que actualmente es uno de los pilares de las economías de los mariscadores de la comarca al ser la que realmente abunda en la ría pontevedresa. Pasó de subastarse a un precio medio de casi 11 euros a algo más de seis euros en apenas una semana.
Otro de los bajones considerables se vivió en la navaja, que en lonja pasó de subastarse a un precio medio de 11 euros el kilo a otro de ocho. No solo se produjo esta caída en los bivalvos sino que se constata un descenso de los precios en la segunda mitad de la Navidad en otros mariscos como la nécora.Solo se disparó en casos como la centolla o el camarón.
Este cierre poco afortunado en cuanto a precios en la campaña de Navidad puso fin también a un año agridulce para el marisqueo en el fondo de la ría de Pontevedra.
