"Es una burla y una maniobra electoralista". Así de duro se mostró ayer el portavoz de la plataforma Long Hope, Alberto Paz, tras el anuncio del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de que autorizaba la firma de un convenio con la asociación de 35.000 euros anuales en 2016 y 2017. Long Hope, que agrupa a antiguos marineros de buques de pabellón noruego que reclaman al país nórdico las pensiones que les corresponderían por los años cotizados allí, rechaza firmar el acuerdo y exige al Gobierno gallego un pacto en condiciones "más favorables" para la cobertura de los costes judiciales de la demanda contra Noruega.

"Nunca pedimos ayudas económicas, lo que queremos es que la Xunta presione al Gobierno para que interponga una demanda contra Noruega en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos", asegura el portavoz.