El invierno se avecina muy agitado en el sector del mar. La conselleira Rosa Quintana desgranó el viernes en Vilagarcía las ventajas que según ella acarreará la futura Lei de Acuicultura de Galicia, actualmente en fase de anteproyecto, pero una buena parte del sector ya se está organizando para mostrar su más rotunda oposición.

Numerosas organizaciones de mejilloneros y cofradías de la ría de Arousa sostienen que la ley que impulsa la Xunta de Galicia abocará al paro a miles de personas y que contaminará las rías con los fármacos y piensos artificiales que suelen utilizarse en las granjas de cría de determinadas especies de acuicultura, como son las de salmón.

Cerca de medio centenar de personas de los dos márgenes de la ría de Arousa se dieron cita en la mañana de ayer en la lonja de Carril (Vilagarcía) para abordar los pasos a dar en las próximas semanas. La Plataforma en Defensa da Ría de Arousa (PDRA) ha asumido la coordinación de las actuaciones, y de hecho firma una alegación única a la totalidad del documento, que suscriben en torno a una veintena de organizaciones de mejilloneros o cofradías de pescadores.

La vicepatrona mayor de Cambados, y presidenta de las mariscadoras, María José Cacabelos afirmó que "este anteproyecto va a favorecer la introducción masiva de las multinacionales de la acuicultura", y que ya hay firmas de Japón, Canadá o Noruega asentadas en España y dispuestas "a introducirse en Galicia y eliminar a su competencia, que somos nosotros".