Las ventas de congelados de marcas blancas lograron el año pasado en España una cuota de mercado del 40%, lo que constituye una subida con respecto al ejercicio anterior, cuando la cantidad alcanzada llegó hasta el 38,4%, un dato que viene a refrendar la importancia de la Feria Internacional de Productos del Mar Congelados (Conxemar) que durante estos días se celebra en Vigo.

La compra de este tipo de productos se está convirtiendo en un hábito para los consumidores de España y de Europa, pues segun los datos de una encuesta realizada a 10.000 personas de países europeos, el 65,3% de lo consumidores compran productos congelados de marcas de distribuidor (también se les denomina así a las marcas blancas) de manera regular, según la revista Conxemar.

Entre los productos congelados de marcas blancas que más destacan en España por su compra están el langostino y el calamar preparado. De hecho, el presidente de la Private Label Manufacturers Association (PLMA) destacó en una entrevista "el notable incremento del langostino congelado, que superó el 54% de cuota de mercado en 2012, y del calamar preparado, con más del 67% de cuota de ventas".

Marcas blancas

Las marcas blancas están ganando cada año mayor cuota de mercado. Este fenómeno no sucede únicamente en el ámbito de los productos congelados, sino también en otros sectores. La evolución es tal, que en el año 2011 en España la cuota de mercado de las marcas de distribución ya superó el 50%, colocándose exactamente en el 50,8%. Tal fue el incremento en estos últimos años que Brian Sharoff, presidente de la PLMA, señaló que "la evolución de las ventas de marcas de distribuidor fue muy positiva en 2012 ya que las cuotas de mercado se incrementaron en la mayor parte de los países, especialmente en España, que registró el mayor aumento con una cuota del 50,8% en volumen y un 40,6% en valor", manteniendo la segunda posición en el top 10 europeo tras Suiza.

Según unos estudios realizados por la PLMA, el incremento no responde únicamente a un factor coyuntural, como sería la crisis económica que asola Europa desde el año 2008, sino la relación calidad-precio de los productos de marcas blancas, como ocurre en los congelados. Por lo tanto la adquisición de este tipo de productos no es una reacción temporal, sino que se va a convertir en un hábito permanente en la sociedad española.

Para corroborar este dato basta con ojear la parte del informe relativa a la valoración de los consumidores. En la misma se indica que la satisfacción de los productos de marcas de distribución frente a los de marcas de referencia es "alta". De hecho, el 62,4% de los consumidores señalaron que son "igual de buenos o incluso mejores". El estudio también constata que el 70% de los encuestados aseguraron que optaron por comprar un producto de marca blanca sustituyendo a uno de referencia que solían comprar, y "9 de cada 10 hicieron una valoración favorable ante esta elección".

Continuarán creciendo

Según la PLMA las marcas blancas seguirán creciendo en los 20 países estudiados, entre los que está España, debido a la percepción positiva por parte de los consumidores y a la situación económica de los mismos.