El Concello de Vigo desvela su proyecto de transformación del ámbito comprendido entre la calle Lalín y el Camiño Chouzo. La propuesta que el alcalde enviará en las próximas horas al Ministerio de Educación y Cultura pasa por convertir la trasera de los actuales edificios de los juzgados en un gran campus cultural y educativo capitaneado por la futura Biblioteca del Estado pero al que se sumaría un "ágora cultural" y el traslado del CEIP Altamar y la residencia de estudiantes anexa ubicadas en Cesáreo González, detrás del complejo deportivo de Traviesas y a 450 metros de distancia.

Abel Caballero solicitará a Íñigo Méndez de Vigo poner en marcha de forma inmediata la redacción del proyecto de construcción de la biblioteca con un diseño singular acristalado sin esperar al vaciado de los inmuebles administrativos previsto para el año 2020. El objetivo es avanzar en la parte más compleja, la construcción del nuevo edificio con un coste de entre 15 y 20 millones de euros que correspondería asumir al Gobierno central, y completar a continuación el resto de la actuación una vez que se liberen los actuales inmuebles judiciales.

Los estudios realizados por el gobierno local plantean dos opciones con ligeras variaciones pero siempre bajo la premisa de que la Biblioteca del Estado debe ser un edificio nuevo y no sirve la rehabilitación de uno de los dos edificios de los juzgados como anunciaron Vicepresidencia de la Xunta y la Secretaría de Estado de Cultura hace ahora un mes. "Eso sería un pastiche, un proyecto propio del Vigo del pasado que nada tiene que ver con lo que planteamos ahora", defendió Abel Caballero durante la presentación de la alternativa municipal para rehabilitar todo el ámbito de Chouzo.

La opción que más convence a Alcaldía pasaría por ubicar la biblioteca en los terrenos expropiados en su día por el Concello para albergar la Ciudad de la Justicia que finalmente se está construyendo en Pizarro y rodearla de una amplia zona verde. Tendría una superficie construida de 6.000 m2 y ocuparía unos 3.671 m2 en planta sobre una parcela de más de 6.500 m2. En esta propuesta el edificio viejo de los juzgados con 18.000 m2 albergaría un "ágora cultural" con espacios para asociaciones, colectivos vecinales y un pequeño auditorio mientras que el denominado edificio de la Audiencia - 7.894 m2- acogería en sus primeras plantas al alumnado del CEIP Altamar mientras que los pisos superiores se destinarían a la residencia de estudiantes con el mismo nombre que depende de la Consellería de Política Social y se usa como albergue en verano.

Esta alternativa es la más costosa porque el Concello tendría que asumir la expropiación de 2.207 m2 de superficie alrededor del inmueble para dotar al colegio de canchas deportivas y el gobierno local también se encargaría del acondicionamiento del "ágora cultural" tras solicitar la cesión del edificio a la Xunta de Galicia una vez que se trasladen los juzgados.

"Queremos vincular este área cultural y educativa con la zona deportiva de Traviesas más sus dos institutos", trasladó ayer el alcalde, quien considera que este "nuevo campus educativo" de la calle Lalín se convertiría en un complemento a la oferta de Torrecedeira y a la biblioteca de la UNED en el Auditorio Mar de Vigo. El Concello trabaja para resolver los problemas de accesibilidad a Chouzo y tendría que abrir un nuevo vial de conexión desde Tomás Alonso a la calle Lalín para canalizar los nuevos flujos generados por el proyecto.

El planteamiento municipal carece de una estimación global de costes. Por ahora solo se cifra en torno a 15 o 20 millones la biblioteca estatal, pero no está cuantificada la inversión necesaria por parte de la Administración Local y ni el coste para la Xunta, a quien correspondería rehabilitar uno de los edificios judiciales para trasladar el CEIP Altamar y la residencia.