Los hermanos Manuel y Alfredo Hermida Rodríguez se sentaron de nuevo en el banquillo de los acusados. Tras ser condenados por fraude fiscal, y a la espera de que acabe la instrucción de más causas que se siguen contra ellos, ayer comparecieron en el Juzgado Penal 1 de Vigo en relación con otro procedimiento por delito contra la Hacienda Pública, una presunta defraudación en el IVA de 2010 a través de Compañía de Protección y Vigilancia Galaica.

La Fiscalía, que también les imputa delito de falsedad en documento mercantil, solicita que cada uno de los hermanos sea condenado a 4 años de cárcel y multa de 500.000 euros. Junto a ellos está acusada su madre, que figuraba como administradora de varias sociedades del grupo familiar y que se enfrenta a 3 años de prisión y al pago de 300.000 euros. Y para un trabajador, al que se atribuye "colaborar de modo efectivo" actuando como "apoderado" de la sociedad, la demanda es de 9 meses de cárcel y sanción de 130.000 euros. En concepto de responsabilidad civil se demanda que los cuatro encausados indemnicen de forma solidaria a la Agencia Tributaria con la cuota supuestamente defraudada: 268.224 euros.

El fiscal, que en la vista de ayer retiró la acusación que mantenía también contra la empresa, sostiene que a través de Galaica, y gracias al entramado de sociedades que "controlaban", los Hermida habrían defraudado a Hacienda a lo largo de ese ejercicio de 2010 mediante facturación "irreal o inflada", así como "negocios simulados". El Ministerio Público cifra esas facturas en casi 1,8 millones de euros.

Las defensas pidieron la absolución. Manuel Hermida declaró que en 2010 él no administraba la empresa -ni estaba al tanto de lo que ocurría en ella-, sino que lo hicieron su esposa (fallecida posteriormente) y un trabajador. "No se de donde sacan que la empresa es ficticia", dijo.

Su hermano Alfredo se desvinculó también, agregando que en aquella época estaba convaleciente por un grave accidente. El trabajador, mientras, declaró que es un "simple asalariado" y que nunca intervino en nada de la gestión de la firma. Además, precisó que no "vio ni intuyó nada que fuese ilegal".