La elevadísima demanda de plazas de guardería en la ciudad y la interminable lista de espera de las familias se convierte en un nuevo punto de fricción entre las administraciones autonómica y local. Un día después de que el conselleiro de Política Social comprometiera el Bono Concilia a las familias que no pueden acceder a uno de sus centros, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, llamó la atención sobre la enorme diferencia de precios en los centros gestionados por el Concello y por el Ejecutivo gallego.

"Insto a la Xunta a que ponga los precios de sus escuelas infantiles a la mitad de precio, como los del Ayuntamiento", reclamó el regidor al gobierno autonómico, cifrando en 243 euros la tarifa máxima que abonan los padres en las guarderías que dependen de Política Social frente a los 124 de las municipales. Durante su visita al centro de Educación Infantil Villa Laura, el alcalde también denunció que las tasas gallegas "se incrementaron un 3,2% este año mientras que las de las guarderías de Vigo están prácticamente congeladas desde hace diez años".

El Concello de Vigo dispone de 620 plazas en las ocho escuelas de la red municipal donde Caballero aseguró ayer que "la mitad de las familias con plaza no pagan nada al no llegar a los ingresos mínimos fijados por las bases". En función de sus recursos pueden quedar exentos de la tasa o pagar un máximo de 124 horas por la jornada completa.

El alcalde se comprometió a seguir construyendo escuelas infantiles tras comprobar que la demanda se mantiene con 1.200 peticiones este mes para las ocho escuelas Atalaia (Teis), Santa Marta (Casco Vello), Santa Cristina (Lavadores), Bouzas, Tomás Alonso, A Costeira (Saiáns), Mestres Goldar (Castrelos) y Navia que suman 450 plazas. Por las tardes quedan vacantes, pero por las mañanas hay una importante lista de espera.

Más centros

Este es el motivo por el que Marea de Vigo propuso ayer consignar recursos económicos en el capítulo de inversiones de los presupuestos de 2018 para nuevas guarderías en detrimento de las humanizaciones que sí pueden ser financiadas con cargo al superávit. En opinión de la edil Marga L. Barreiro, "no es comprensible que si hay 55 millones en obras en todo el año 2017 no existan recursos para la construcción de escuelas infantiles", denunció. Marea considera que las zonas donde hay más demanda en estos momentos son Bouzas, Navia y Coia, Lavadores y Calvario, Valladares, el centro y la zona del Casco Vello con mucha población joven.