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El próximo reto, resolver el atasco burocrático del PIF

López Veiga vaticina que el "acuerdo sensato" de la estiba atraerá a más navieras

"Es un paso positivo que contribuirá a que el Puerto de Vigo vuelva a ser competitivo", prevé el presidente. A falta del detalle cree que "se ajusta a los márgenes legales"

Instalaciones del Puesto de Inspección Fronterizo (PIF) del Puerto de Vigo en Guixar. // FdeV

La Autoridad Portuaria de Vigo celebra los cambios aprobados por los estibadores para que su actividad resulte más eficiente y barata a las navieras. Su presidente, Enrique López Veiga, se muestra "agradecido" con los trabajadores por haber logrado un acuerdo "sensato y sin conflictividad" convencido de que ayudará a captar nuevos tráficos y hasta el regreso de Maersk a Guixar.

Como adelantó FARO, el pacto aprobado por los estibadores este miércoles es el resultado de las negociaciones mantenidas desde octubre tras el apercibimiento abierto por el Puerto a la Sociedad Anónima de Gestión de Estibadores Portuarios (Sagep) por considerar el modo de operar su plantilla "fuera de todo margen normativo". En el plano funcional lo acordado coincide con una adaptación al IV Acuerdo Marco del convenio SEED del 96 -cuando todavía el Estado participaba en el accionariado de la estiba- y como tal elimina de entre las tareas exclusivas de la Colla viguesa aquellas que la ley vigente define como "complementarias", como la entrega y recepción de contenedores dentro de la terminal y la carga y descarga de vehículos sin matricular. A estos cambios, el acuerdo incorpora otros cruciales en el día a día de los muelles, como la apertura cuatro horas más de la terminal de contenedores (de 6.00 a 22.00) o la complementación de la jornada en un segundo buque.

Con la salvedad de que aún tiene que leer lo acordado, por lo que ya le han transmitido las partes, el presidente del Puerto no tiene dudas de que el acuerdo alcanzado se ajusta al IV Acuerdo Marco. "Yo tengo que dar por bueno lo que me dicen. Tendré que mirar la parte final, pero si es así, es lo que habíamos pedido", razona. Así que aplaude las nuevas medidas de funcionamiento de la estiba al interpretarlas como "una flexibilización de las condiciones de trabajo". Aprovecha para recordar que van en la línea de lo que él siempre recalcó, "que los salarios, con todo lo espectaculares que son, no era el núcleo de la cuestión sino más la rigidez en el desempeño de su actividad". En este sentido prevé que este "conjunto de pasos" permitirán que "los costos de escala sean menores y entonces esto hará que el puerto de Vigo vuelva a ser competitivo".

Considera que el Comité de Empresa -presidido por UGT y representado además por Comisiones y Coordinadora- ha tomado "una decisión inteligente". "Con estas medidas aprobadas ahora van a asegurarse mucho más su futuro. Si se dan pasos en esta dirección, ¿quién va a prescindir de los estibadores? Nadie quiere prescindir del colectivo sino del sistema", puntualiza.

En octubre, la Autoridad Portuaria informó de su apercibimiento a la Sagep a Puertos del Estado y a la Comisión Nacional del Mercado de Valores y la Competencia. Esta iniciativa, verdadero detonante del acuerdo de la Colla, "no era más que una advertencia de que debían ceñirse a los márgenes legales", explica López Veiga. Sobre qué efectos tendrá ahora, precisa: "Por la información que me dan, el pacto se ajusta a la ley, así que no debería de haber más consecuencias".

Sin conflictividad

Con las nuevas medidas de funcionamiento acordadas está satisfecho aunque el dirigente portuario siempre defendió la necesidad de que la estiba operase con un convenio colectivo de ámbito provincial. "Es que creo que se deberían ser más ambiciosos pero lo digo por el propio bien de los trabajadores. Lo mejor para su protección es la aplicación de un convenio colectivo y uno de ámbito suficiente", argumenta tras admitir que esta cuestión "ya no es de mi competencia".

En cualquier caso resume como "lo que realmente importa" que lo acordado propiciará la entrada de nuevas navieras y hasta podría facilitar el regreso de Maersk, la armadora que con su traslado a Marín hizo ver al presidente que la terminal de Vigo era poco competitiva además de cara. "Lo acordado ahorrará muchos costos a las navieras entonces claro que atraerá tráficos y marca una tónica. Por eso no puedo estar más que agradecido que todo esto se haya hecho sin conflictividad. Es lo sensato y lo más realista por parte del Comité de Empresa", concluye.

Las empresas quieren aplicar los cambios cuanto antes. Aún falta que el Consejo de Administración de la Sagep ratifique el acuerdo pero su accionista mayoritario, Termavi, comenzó ayer a organizar con los trabajadores las nuevas medidas con la idea de ponerlas en marcha la próxima semana, cuando también está prevista la reunión del Consejo.

Ahora, a por el PIF: "Hay que resolverlo"

  • Con el acuerdo en la estiba, al menos en principio el presidente de la Autoridad Portuaria considera resuelto un problema por lo que ahora centrará todos sus esfuerzos en otro de los factores que desangran la competitividad de los muelles vigueses: las trabas administrativas en el Puesto de Inspección Fronterizo (PIF). "Yo tengo que decir las cosas como las veo y como sé que son. Y la verdad no tiene que estar certificada por un funcionario de Sanidad Exterior. Porque la verdad es la que me han dicho los empresarios directamente. Que una parte muy sustancial de ellos trae las mercancías por Leixões por las rigideces del PIF de Vigo", revela.López Veiga teme que la persistencia de estas trabas por parte de los inspectores del PIF genere una "deslocalización de las empresas de Vigo". "Ese riesgo existe porque la terminal portuguesa está ahí al lado y acabarán instalándose allí si siguen teniendo problemas en Vigo", alerta. Mantiene que "las prácticas paraaduaneras en general están haciendo al vigués como un puerto complicado y difícil. Así que si seguimos emperrándonos en llevar las inspecciones con un rigor innecesario pues los tráficos se acabarán perdiendo definitivamente y Vigo perderá su preeminencia como capital de industria de la pesca", advierte.Para el dirigente portuario, ahora "lo urgente" pasar por acabar con este tapón aduanero. Con este objetivo continúa con "conversaciones constantes al más alto nivel para buscar una solución". "Es mi principal preocupación. Hay que resolverlo", enfatiza el presidente.

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