"La de gente que chupó guardias allí". A los directivos de la Asociación de Antiguos Marineros de la Etea, la torreta de vigilancia del antiguo recinto militar de Teis le provoca nostalgia. En esta atalaya metálica enclavada en el paseo marítimo y a la altura de la playa de A Punta, cientos de jóvenes pasaron muchas noches de su Mili más que vigilando la llegada de un posible enemigo invasor a mantenerse despierto no fuera a quedarse sin permiso de fin de semana. Ahora la instalación, de 10 metros de alto, se cae a cachos. Literalmente porque en los últimos días se desprendieron varias partes metálicas. La Asociación de Vecinos de Teis ha solicitado al Concello su desmontaje "por seguridad".
La torreta lleva más de 50 años en ese mismo emplazamiento, según Marinetea, y desde que el Ministerio de Defensa completó el desalojo en 2002, se ha quedado como uno de los pocos vestigios de la función militar de estos terrenos de Teis. El colectivo de antiguos marineros, volcado en la promoción de la historia de la base militar y responsable de un museo abierto en uno de los edificios, entiende que la torreta, aunque podría considerarse "un icono" de la vieja Escuela de Transmisiones y Electrónica de la Armada, "carece de la suficiente relevancia para defender su conservación", razona su presidente, Carlos Pérez.
En Marinetea recuerdan que cuando la Xunta construyó el parque infantil, el entonces conselleiro Agustín Hernández planteó convertir la torreta en una especie de mirador artístico, "hasta encargó un boceto a un escultor", apunta. "Lo cierto", denuncia el secretario de la asociación vecinal, Anxo Iglesias, "es que en los últimos quince años nadie ha reparado en la existencia de la estructura. Desde la salida de los militares está muy deteriorada, oxidada por completo. Tal como está supone un grave peligro", alerta de ahí la petición al Concello para que proceda a su desmontaje.
Carlos Pérez no cree que valga la pena siquiera proponer la recuperación de la torre en otro emplazamiento. Para evitar que alguien se subiera, el Concello instaló una valla a su alrededor, por lo que el presidente de Marinetea teme que la misma tentación pueda producirse en cualquier parte adonde fuera trasladada. Precisamente era este uno de los principales reparos que había puesto el colectivo a ese "mirador artístico" planteado por el gobierno autonómico. A los vecinos de Teis, en cambio, lo único que les preocupa es que se retire de allí. "Y cuanto antes no vaya a ser que tengamos que lamentar un accidente", avisa Iglesias.
