El GPS ha vuelto a jugar una mala pasada a un conductor. En esta ocasión le ocurrió en Vigo al chófer de un tráiler, al que seguir a pies juntillas las instrucciones de su sistema de navegación lo llevó a un destino que no se esperaba: acabó atascado con su vehículo en un estrecho camino de San Andrés de Comesaña, bajo un árbol de grandes dimensiones. Para salir del apuro, fue necesaria la intervención de los bomberos, que cortaron una de las ramas del roble para que el camionero pudiera seguir su camino. Esto sucedía en plena madrugada. Pero dado el cansancio que acumulaba el conductor y la complejidad de la maniobra de salida, se optó por demorar hasta horas después, ya por la mañana, la salida del vehículo de allí. Varios agentes de la Policía Local guiaron al chófer para que pudiese abandonar el lugar donde en plena noche había quedado bloqueado.

La alerta de este suceso se recibía en torno a la una de la madrugada. El conductor procedía de Barcelona e iba a la zona industrial de Camiño do Caramuxo. Pero cuando ya estaba a punto de llegar a su destino, el GPS lo llevó por una dirección errónea. Acabo bloqueado en Camiño Rial a causa de un árbol de grandes dimensiones. Hasta el lugar se trasladaron varios bomberos del parque de Balaídos, que cortaron una gran rama del roble que aprisionaba el remolque del tráiler. También acudieron agentes de la Policía Local. Fuentes de este cuerpo señalaron que decidieron posponer la salida del camión de allí hasta media mañana de ayer ya que el conductor estaba cansado debido al viaje y las maniobras para abandonar el estrecho camino eran complicadas.

Los bomberos recordaban ayer que no es la primera vez que tienen que intervenir en un suceso de esas características provocado por el GPS. Concretamente, citaron un caso similar de otro camionero.