Una vez constituida el Área Metropolitana de Vigo, algo que se espera para mediados de octubre, ¿cuál será el primer tema que aborde? Según avanzó ayer el alcalde de Vigo, Abel Caballero, será la incorporación de los municipios que han manifestado su interés por sumarse a los 14 fundadores. "La ampliación deberá ser la primera decisión", subrayó y aclaró que es algo "acordado" entre los regidores.

"Cuánto antes estén dentro todos los que quieren entrar, mejor para el Área, no debemos excluir a nadie", defendió Caballero. Aclara que "al menos diez" concellos manifestaron su interés por incorporarse. Estima que el territorio del ente supramunicipal se aproximaría al del área sanitaria -compuesta por 26 municipios-, con algunas diferencias, como la adhesión de Pontecaldelas, que no pertenece a ella. Volvió a criticar la condición de que los miembros sean "limítrofes" por situaciones como la de A Guarda, que dependerá de O Rosal para poder adherirse. El regidor vigués estima que tendrá unos 600.000 habitantes y que su tamaño será "una de sus virtudes" junto al "dato importantísimo" de que será fronteriza con Portugal.

Una vez puesta en marcha, destaca que será el momento de "empezar a tomar decisiones a favor de los ciudadanos". Entiende el área como un instrumento para "tener mejores servicios y atender mejor" a la ciudadanía, al tiempo que se conforma "un proyecto conjunto de avance y desarrollo". Tras manifestar su "satisfacción inmensa" por la aprobación el martes de la ley y por el "futuro excepcional" que promete para la comarca, reprochó que conseguirla supuso una "batalla durísima, larguísima y enconada" con el PP y atribuyó la victoria en ella al resultado de las últimas municipales en la ciudad. Le confiere al nuevo ente "la misma relevancia que tuvieron en su momento las provincias, o más, porque aún compartimos más cosas" y advierte que no es una institución "coyuntural" sino "para un siglo".

Por su parte, la portavoz del PP de Vigo, Elena Muñoz, considera que lo prioritario es definir qué servicios gestionará el Área, no que el ente "crezca más y más". Teme que "la prisa de Caballero para ampliarla sea una maniobra de distracción porque ahora que existe no sabe qué hacer con ella". Reprochó al PSOE que "se incorporara en último momento" al proyecto. Para la edil popular la "primera tarea" del alcalde es activar la integración de Vigo en el transporte. Tilda de "inaudito" que la concesionaria del autobús urbano necesite hasta septiembre para poner en marcha el software de lectura de la tarjeta metropolitana. "Caballero tiene que garantizar que empiece a funcionar en julio", sostiene

Marea de Vigo vaticina un "choque permanente de trenes" entre el PP y el PSOE sobre el Área y los acusa de estar utilizándola como "instrumento político". Su portavoz, Rubén Pérez, resalta que "esta ley se quiso aprobar tan rápido porque tenemos unas elecciones autonómicas". Entiende que lo "primordial" es emplear el ente para "abaratar los servicios públicos" y ser "capaces de tener retorno económico" de ellos. Por lo que critica que "lo sustancial del Área está sin poner sobre el papel" y se pregunta qué funciones tendrá. Pérez propone un sistema integral de gestión de residuos para no depender de Sogama. Previene de que Vitrasa pueda pedir la ampliación de la concesión como contraprestación a la integración en el transporte. Defiende que los nuevos miembros sean limítrofes para no dar "saltos entre concellos" si se coordinan los servicios de emergencia y pide un estudio urbanístico, demográfico y sociológico "serio" para las nuevas adhesiones.

El representante local del BNG, Serafín Otero, aplaudió la aprobación de la ley del Área como un "acuerdo muy importante" que "va a permitir la mejora de los servicios públicos en los 14" municipios. Recuerda que fue "uno de los caballos de batalla del BNG" desde "hace 20 años". Lamenta que se tardara tanto y culpa de ello a PP y PSOE porque "siempre la echaron para atrás". Pide que se "acelere al máximo" la incorporación de otros concellos, que la Xunta y la Diputación le transfieran competencias con su financiación y que se haga a la ciudadanía partícipe.