El alcohol pisa el freno en Vigo. Subirse al coche después de haber bebido es cada vez menos habitual. Lo constatan los agentes de la Policía Local. Menos "positivos" en los controles de alcoholemia, pero principalmente -y lo más importante- muchos menos accidentes causados por la borrachera de los pilotos. La cifra se vuelve a situar por tercer año consecutivo en un mínimo histórico: 114. Estos fueron, según fuentes municipales, los siniestros que hubo el año pasado en el casco urbano y que podrían haberse evitado si el conductor no hubiera ingerido alcohol antes de subirse al coche.
Aunque más de 100 casos parecen todavía muchos, lo cierto es que se han desplomado casi a la mitad en apenas tres años. En Vigo se registraban hasta 2012 más de 200 accidentes anuales en los que la embriaguez era la causante. De hecho, estuvo casi siempre entre los tres principales desencadenantes de siniestros de tráfico en Vigo y ha pasado a ser ya el sexto. Distracciones, mal uso de las rotondas, no respetar las señales de ceda o stop, los cambios de carril en tramo recto y no guardar la distancia de seguridad provocan a día de hoy más accidentes en Vigo que el alcohol.
La concienciación de los conductores es cada vez más importante. Pero a ello no solo han contribuido las campañas de la Dirección General de Tráfico, el carné por puntos o el aumento de la cuantía de las multas económicas. La Policía Local también ha reforzado el control en la ciudad en los últimos años para lograr atajar esta problemática. Antiguamente los controles de alcoholemia se hacían casi en exclusiva durante las noches de los fines de semana. Ahora es habitual topárselos incluso por la mañana de lunes a viernes. Una iniciativa con la que persiguen dar la sensación de que pueden estar a cualquier hora en cualquier punto de la ciudad para disuadir a los conductores de que cojan el coche si han bebido.
Pero no solo las estadísticas de accidentes reflejan esta importante disminución del consumo de alcohol al volante. También son cada vez menos los pilotos que dan resultado positivo en los controles de alcoholemia. Según los últimos datos oficiales de la Policía Local a los que ha tenido acceso este periódico (2014) de 8.000 pruebas practicadas en ese ejercicio, en apenas 500 casos el conductor iba borracho.
