Una de las claves a la que los mellizos García Freire atribuyen su triunfo en "¿Qué estás leyendo?" es ser prolíficos. Escribieron 450 entradas en su blog en 365 días. Sumemos que, además, no han dejado de lado la calidad para conseguirlo.

Su "guía rápida para ser un devoralibros" incluye entrevistas, noticias de novedades editoriales, reflexiones en torno a la literatura y, sobre todo, reseñas de la infinidad de libros que consumen.

Para clasificarlos, incluso se han inventado acrónimos que recogen en su particular diccionario. Si un libro es tan emocionante "que se te pega a las manos", lo denominan con las siglas L.B., de Loctite Book, pero si es "tan aburrido que causa un sueño profundo", lo califican como S.M.S, de Super Monótono y Soporíforo. Los buenos títulos, de argumento aceptable, pero descuidada narración que "lo echa todo por la borda", son D.N.I (con Déficit Narrativo, pero Intenso). T.BO. se refiere a buenos comienzos con decepcionante final, un Titanic Book. Y así, hasta quince clasificaciones.