Padres y abuelos son el refugio al que recurren miles de ciudadanos sin ingresos en la primera ciudad de Galicia. Los desempleados de la comarca de Vigo buscan apoyo en su entorno más próximo para subsistir. Más de la mitad de los hogares del municipio reconoce llegar con dificultades a final de mes y la falta de perspectivas laborales ha provocado que en los últimos tres años se duplicara el número de familias que han decidido solicitar ayuda económica a parientes o amigos íntimos. Los últimos datos del Instituto Galego de Estadística (IGE) revelan que un 10,62% de las familias recibieron apoyo de sus más allegados durante el primer trimestre de este año frente al 6% que se encontraba en esta situación en 2010.

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