Uno de los cientos de vehículos con matrícula portuguesa que circulan a diario por el área de Vigo pasa a más de 110 km/h por uno de los radares de 80 km/h ubicados en la autovía A-55 entre Vigo y Tui. El dispositivo lo detecta y "dispara", pero el infractor queda libre de multa gracias a la dificultad que tiene Tráfico para notificarle la sanción por su condición de extranjero. La infracción, grave, le costaría 300 euros y 2 puntos del carné a un conductor español. Situaciones de impunidad como ésta se suceden casi a diario en el área viguesa por la proximidad a Portugal. Para evitarlo, la Jefatura de Tráfico de Pontevedra está estudiando implantar un sistema que alerta en el acto a la patrulla de la Guardia Civil más cercana cuando un vehículo con matrícula extranjera excede los límites de velocidad.
El mecanismo no es nuevo en España. La Dirección General de Tráfico lo estrenó en el año 2010 en cuatro radares fijos de Zamora, Castellón, Murcia y Alicante. Ahora podría extenderse a Pontevedra. Según pudo saber este periódico, el Centro de Control de la Dirección General de Tráfico del Noroeste está analizando ya el índice de infractores extranjeros que contabilizan los radares del área de Vigo para determinar los dispositivos en los que se podría instalar este sistema de alertas.
"Cuando un coche con matrícula extranjera supera el límite de velocidad, el radar envía inmediatamente la fotografía tanto al Centro de Tratamiento de Denuncias Automatizadas de León como a la patrulla de la Guardia Civil que esté más cerca de esa zona. De esta forma, pueden localizar al conductor prácticamente en el acto para notificarle la denuncia", explican. "Hay algunos radares en los que los infractores extranjeros suponen el 60% del total", cifran fuentes oficiales del Centro de Control de la DGT sin precisar en qué tramo de autovía.
Cuando la patrulla recibe el aviso y logra dar el alto al conductor, le muestra al infractor la fotografía que le remitió el sistema instalado en el radar y le comunica la sanción. El piloto debe pagar la multa en el acto aunque luego puede recurrirla. Si carece de dinero, los agentes le inmovilizarían el vehículo.
El problema que supone tanto para la Administración central como local cobrar las multas a los vehículos con matrícula extranjera podría estar en vías de solución. El Parlamento Europeo dio un paso importante el año pasado al aprobar una Directiva que refuerza el intercambio de información entre los países de la UE para asegurar que las sanciones llegan al domicilio de los infractores independientemente de su nacionalidad. Los países tienen dos años para transponer a su legislación a este cambio.
Dos de cada tres pontevedreses conservan intacto su saldo de puntos del carné y acumulan ya 15
Más de 383.000 pontevedreses tienen desde el pasado 1 de julio 15 puntos en su carné de conducir, tres más que cuando se implantó el nuevo permiso, en 2006. Esta cifra se corresponde con el 64% del censo de conductores de Pontevedra, que son a los que ha premiado la Dirección General de Tráfico con un punto extra por no haber cometido hasta ahora ninguna infracción que supusiera la detracción de puntos. Antes, en 2009, les había regalado otros dos por el mismo motivo.
En el polo opuesto se encuentran los 4.750 pilotos que se han quedado sin permiso de circulación desde julio de 2006 al haber perdido los 12 puntos iniciales que concedió la DGT a cada conductor. Además, a día de hoy hay más de 3.000 pontevedreses en situación "crítica", ya que su saldo de puntos es de tres o menos, por lo que si cometen una infracción grave o muy grave se quedarán sin carné de conducir. Tráfico anunció que enviará este mes una carta a los conductores que estén en esta situación para explicarles la posibilidad que tienen de realizar un curso para recuperar su saldo.
El exceso de velocidad, con 124.882 puntos retirados, es la infracción más habitual en Pontevedra. Le siguen las faltas por circular sin cinturón o sin Sistema de Retención Infantil (29.651); conducir con una tasa de alcohol superior a la permitida (25.491) o pilotar hablando por el teléfono móvil (22.110).
Por otra parte, la Policía Local de Vigo notificó ya este año a la Jefatura Provincial de Tráfico la detracción de más de 9.000 puntos (en el gráfico). Aunque el Concello vigués fue de los primeros de Galicia en aplicar el nuevo permiso, al principio no incluyó todas las infracciones y solo enviaba las más graves. Desde el año pasado, cuando notificó más de 20.000 puntos, lo cumple al cien por cien.
