El astillero Vulcano retomará el trabajo a mediados de este mes de noviembre, según ha confirmado este viernes su director, José Luis Méndez, para concluir el buque sísmico 533, cuya armadora --una empresa noruega-- estudia encargar la construcción de un barco gemelo, el 535 --que ya estaba previsto que se construyera en la filial Juliana, antes de que anunciase su liquidación--.

Méndez ha explicado, en declaraciones a los medios tras participar en una reunión con el conselleiro de Economía e Industria, que la armadora ha aceptado acordar un nuevo plazo de entrega para el 533. Así, el nuevo calendario será del 15 de noviembre de este año al 15 de noviembre del año que viene.

Asimismo, se ha mostrado optimista con respecto a la posibilidad de que Vulcano aumente su carga de trabajo con el 535, e incluso ha confirmado que la empresa tiene contactos con otras armadoras y "hay opciones" para nuevos encargos.

Por su parte, el conselleiro, Javier Guerra, ha trasladado tanto a la dirección de la empresa como al comité "la seguridad de que la financiación está garantizada", y ha avanzado que, el convenio en el que se enmarca la aportación de los avales de la Xunta --por 16,7 millones de euros--, estará "disponible a finales de la semana que viene".

También ha recordado que el astillero vigués plasmará en el convenio su compromiso de destinar todo el importe de los avales, un total de 21 millones de euros, a la financiación del sísmico, y no al pago de deudas u otras cuestiones.

TIEMPO PERDIDO

Guerra ha mostrado su "satisfacción" por la concesión del aval a Vulcano por parte de Pymar (Pequeños y Medianos Astilleros Sociedad de Reconversión), aunque ha puntualizado que "es una pena haber perdido un tiempo precioso". Asimismo, el conselleiro ha explicado que la financiación de la Xunta se irá librando "a medida que vaya haciendo falta".

El presidente del comité de empresa, Antonio Fernández 'Sesé', ha recalcado el deseo de la plantilla de "volver al trabajo lo más rápido posible", y ha subrayado que el buque 533 es "un pulmón para empezar". También ha comparado el astillero con un "árbol de Navidad", al que ahora "faltan los adornos", que son los operarios de las industrias auxiliares que se irán incorporando progresivamente a la grada viguesa.