"No nos queda; ni NorLevo, ni Postinor". La ausencia de los dos medicamentos que se conocen como píldora del día después (o postcoital) queda clara en las oficinas farmacéuticas de Vigo, que se declaran "desabastecidas".

Un recorrido por siete farmacias en zonas tan dispares como Pizarro, Islas Canarias, Pino o Travesía de Vigo desvela esa falta de stock, cuando han pasado menos de veinte días desde que el medicamento de anticoncepción de emergencia se dispensa sin receta médica en las farmacias (28 de septiembre). Uno de los primeros en reconocer la situación es el vocal de Comunicación del Colegio de Farmacéuticos de Vigo, Manuel Carrascal, que corrobora la carencia desde su propia farmacia: "El desabastecimiento es total; no hay en ninguna oficina de Vigo".

¿La razón? Problemas de distribución. Que los laboratorios no las están trasladando a las farmacias por cambios en el cartonaje y el prospecto –según el Colegio Farmacéutico– y también, que la demanda ha aumentado ligeramente y se ha resentido el stock, aseguran los farmacéuticos consultados. "Algunos despachos no tienen ni una píldora", aseguran.

Muchas mujeres se han llevado un chasco confiando en que, con la entrada en vigor del despacho sin receta, la obtendrían en la farmacia de al lado. "No la tenemos; hay que pedirla a Pontevedra y tarda un día en llegar", ofrecen como mejor solución en un despacho cercano a Vía Norte. "Hoy vino una chica y se llevó la última", indican en otro de Travesía de Vigo. Es más de lo que consigue la mayoría de los centros consultados: "Tenemos problemas con el suministro desde hace dos semanas; el aumento de la demanda rompió el stock y no hay nada, ni en León, ni Zamora, ni Valladolid", explican en otra farmacia de la calle Venezuela.

Eficacia a contrarreloj

Se trata de un medicamento que pierde su eficacia a las 72 horas de la relación sexual de riesgo, si bien es más efectiva cuanto más se aproxime la toma a las primeras 24 horas, de ahí la importancia de tomarla cuando antes. Desorientadas y confusas, los profesionales recomiendan a las solicitantes que vayan al centro de salud que les corresponde o a Urgencias.

El suministro hospitalario no peligra. De hecho, el Sergas asegura que cuenta con la cantidad adecuada porque se realiza por concurso público (el último, efectuado en enero, ascendió a 201.923 euros y tiene validez de dos años). Del mismo modo, culpa del desabastecimiento a los farmacéuticos por no por pedir los medicamentos "con antelación suficiente". En sólo un semestre, la sanidad pública dio en Vigo casi un millar de píldoras postcoitales (948) entre centros de salud y puntos de atención continuada.

Consultados sobre la posible objeción de conciencia, algunos farmacéuticos señalan tímidamente a uno o dos colegas que no las despachan por atentar contra sus ideas, pero afirman que no se trata de una práctica generalizada. Descartan que tras el desabastecimiento se esconda la objeción. Los farmacéuticos están obligados a aceptar un código de conducta que se comprometían a seguir cuando alguna mujer solicitara dicho medicamento.