"El PPdeG después de casi 30 años, tiene más futuro que pasado", proclamó ayer su líder, Alberto Núñez Feijóo, quien arengó a los suyos a salir a la calle "con la cabeza muy alta" a frenar el avance de Ciudadanos. En un momento en que diferentes encuestas predicen que el partido de Albert Rivera supera en intención de voto en España al PP tras las elecciones catalanas, Feijóo quiso animar y movilizar a sus cuadros dirigentes y bases. En algo más de un año, habrá elecciones municipales, y no es cuestión de despistarse ni de desanimarse por "los reveses electorales".
En la Junta Directiva del PPdeG, Feijóo propuso "hacer autocrítica, pero sin bajar la cabeza" y "con humilidad" permanecer "atentos a las demandas de los gallegos".
El también titular de la Xunta, que esta semana celebra doce años al frente del PP gallego, minusvaloró a Ciudadanos en Galicia. "Aquí no se llama nuevo a aquellos que fueron pasando por distintos partidos hasta que alguno los acepte en ese partido", dijo en alusión a que Ciudadanos se alimenta de exdirigentes y exmilitantes del PP gallego y UPyD. Feijóo aseguró que Ciudadanos tiene "cero escaños en Galicia", una de las comunidades, junto a País Vasco, donde el partido naranja no termina de convencer, porque "en Galicia nos conocemos todos".
Para Feijó, la clave del éxito del PP es que es capaz de defender la convivencia constitucional, y al tiempo entender y adaptar su proyecto a "las singularidades de la comunidad".
Feijóo contrapuso su política, "útil sin dogmatismos, sin fracturas, sin insultos, con un proyecto con ideas claras sin trampas ni cartón", al "populismo barato de derechas o izquierdas" y a "las ideas de quita y pon".
Para el líder de los populares gallegos, "el espacio político que ocupa el PPdeG es Galicia sin excepciones, ni centro, ni izquierda, ni direcha, ni nacionalismo, ni constitucionalismo".
Feijóo, que esta semana aseguró que no optará a un cuarto mandato en Galicia, quiso dejar claro que el resto de la legislatura trabajará al cien por cien. Es su respuesta a la oposición, que ve al presidente de la Xunta más centrado en sus posibilidades de futuro en Madrid que en sus responsabilidades autonómicas. "Hoy tengo más ilusión que aquel quince de enero de 2006, hoy tengo más ganas que nunca de seguir construyendo la Galicia que queremos", declaró en alusión a la fecha de cuando relevó a Manuel Fraga como presidente del PP gallego. También sacó pecho porque desde entonces ha salido invicto frente a "17 líderes" que ha desfilados por la oposición.
El secretario xeral del PPdeG, Miguel Tellado, instó a mantener la "auoestima· frente a un partido que es "una creación de laboratorio politológico, producto de marketing, una argucia electoral o un partido instrumental".
