El de 2014 fue el primer año de diminuto crecimiento en la economía de Galicia después de la doble recesión, aunque ya antes, en 2012, cuando el Producto Interior Bruto (PIB) caía todavía por encima del 3%, la contratación en la comunidad entró en la senda alcista de la que no ha salido desde entonces y que le llevó a cifras históricas en los dos últimos ejercicios. Sin contar las prórrogas ni la conversión en fijos, en 2015 se firmaron 853.667 contratos y 915.628 el pasado 2016. El arranque del nuevo año abre la puerta a que vuelvan a marcarse máximos. En enero y febrero, según los datos que acaba de publicar el Instituto Galego de Estatística (IGE), van 131.175, un 6,2% más que en los mismos meses de 2016. ¿Cómo es posible que el desempleo se mantenga por encima del 17%? Porque la principal razón de esos récords está en los puestos temporales, especialmente de los que duran solo días. Una semana o incluso menos. Es el tipo de contrato más usado en Galicia. Se duplicaron desde 2012 y en los dos primeros meses que van de 2017 aumentaron otro 15%.
Cada día, entre enero y febrero, se formalizaron en la región una media de 2.223 contratos, hasta ese total de 131.175. Los indefinidos suman 7.852 -el 6%-, con un alza en comparación con el ejercicio precedente del 2,3%. Los temporales, en cambio, avanzan cerca del triple, el 6,4%. Unos 123.300.
De los contratos que en un principio eran de carácter eventual y se transformaron en indefinidos este año, por el momento solo constan datos de enero en la información que la Consellería de Traballo traslada al IGE. Fueron 2.781, un 41% más que en enero de 2016. Pero su peso en el global de la contratación sigue siendo muy pequeño. El 3,8%. Con ambas modalidades, los fijos iniciales y las conversiones, los indefinidos, únicamente en enero, alcanzan los 6.912.
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Alrededor de 40.100 no pasaron de una semana de duración. Son ya el 30,6%, próximos a un tercio del conjunto de contratos en Galicia. A la vista de lo que está sucediendo con ellos no es de extrañar que pronto salten incluso ese porcentaje. En 2013, los puestos de menos de siete días aumentaron un 19%. A partir de 2014, sin excepción, se mueven a un ritmo de subida superior al 15%, como recogen las estadísticas oficiales. Otros casi 12.000 se prolongan como mucho un mes, con un incremento en su caso del 4,7%; del 4,8% entre los de uno a seis meses, que son 21.800; prácticamente un 13% de aumento en los contratos de seis meses a un año completo (3.360). El único descenso se registra, precisamente, en los de mayor plazo. Los que se alargan más de un año. Apenas 500, un 1,7% por debajo de 2016. Hay 45.500 de los que no hay una duración concreta, un 0,6% más.
El 51,8% de todos los contratos de los dos primeros meses del año en Galicia los firmaron hombres. Las mujeres, el 48,1%. La brecha aumenta en los empleos indefinidos: ellos concentran el 55,8%. Las mujeres sí son mayoría, aunque solo por un punto, en el peso de los temporales en los contratos nuevos: el 94,5%. En los hombres suponen el 93,5%.
Por edades, la evolución de la contratación destaca especialmente en los jóvenes de 16 a 19 años, donde aumenta más de un 17%. Claro que son muy pocos en el reparto. Menos de 2.000. El 2%. Pero puede ser un indicador, porque justo en la siguiente franja, de 20 a 24 años, está otra de las subidas más importantes, del 10,7%, hasta cerca de 16.000. El 12%. Casi un 12% también medran los contratos en los de 50 a 54 años (9.756) y un 11% entre los 55 y los 59 años (5.456). Entre los 25 y los 29 años, que es la horquilla que absorbe más contratos (22.760), el aumento fue del 8,2%. Entre los 30 y los 34 años (20.800) se estanca: el avance fue de solo el 0,1%.
De todas las actividades que mueven mayor volumen de trabajos nuevos, los mejores datos están en agricultura, ganadería, caza y servicios relacionados, con casi 1.700 contratos y un incremento anual del 27,2%. Le siguen la industria de la automoción, un 22,6% más (3.400); y el sector educativo, que registra un ascenso del 15,7% (4.795).
Los que más contratos aglutinan son los de siempre. El comercio mayorista (4.477) y minorista (10.897), con subidas del 14% y el 11,4%, respectivamente; y la hostelería: un 6,8% más en alojamientos (3.972) y un 13,5% en bares y restaurantes (18.433).
Los números rojos vienen de la construcción: cae un 8,7% en obra especializada y el 11% en edificación.
