La estampa clásica de un autobús semivacío recorriendo parajes despoblados en Galicia va cambiar. El PP anunció ayer que presentará una enmienda a la ley de medidas de acompañamiento de los presupuestos de 2017 para que las empresas concesionarias del transporte regular interurbano puedan subcontratar taxis de hasta nueve plazas para sustituir a los autobuses en los recorridos que presentan una escasa demanda de viajeros. En vez de hacer el viaje un autocar, lo podrá hacer un taxi, cuyos costes de funcionamiento son mucho menores que los de un autobús.

Esta modalidad de transporte está pensada, según el PP, para garantizar el servicio de transporte regular especialmente en zonas rurales con baja densidad de población, "al mismo tiempo que se presta con una mayor eficiencia y sostenibilidad ambiental".

La medida la habían pedido tanto la patronal del taxi como representantes de las concesionarias de transporte tras llegar a un acuerdo y reunirse previamente con la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez.