"Cooperación, competencia y complementariedad". Son las tres palabras que, en opinión del director xeral de Relacións Exteriores, Jesús Gamallo, deben definir la relación entre Galicia y Norte de Portugal. Y ante la deslocalización de empresas hacia el país luso y la competencia de firmas portuguesas que están captando contratos importantes de la automoción gallega, el representante de la Xunta abogó por "poner el acento" en la complementariedad.

En todo caso, restó importancia al problema al asegurar que la competencia existe incluso dentro de un mismo territorio y puso como ejemplo la situación de los tres aeropuertos gallegos. Durante la celebración en Santiago de unas jornadas sobre "As relacións económicas entre Galicia y el Norte de Portugal", organizadas por el Consello Económico e Social, el director del Idega, Alberto Meixide, advirtió que el proceso de deslocalización es "imparable", pero advirtió que ocurre en ambos sentidos: de Galicia hacia Portugal y al revés.

Para Hugo Barreiro, representante de Asime (Asociación de Industriales Metalúrgicos de Galicia), es importante "entender que debemos cooperar para ser más fuertes". Además aprovechó su intervención para quejarse por el hecho de que muchas de las empresas vinculadas a la automoción quedan fuera de las ayudas europeas porque no son consideradas pymes, pero tampoco llegan al nivel de trabajadores por el que se consideran "gran empresa".

Desde Portugal acudió el presidente de la Cámara Municipal de Arcos de Valdevez, Joan Manuel Esteves, que puso sobre la mesa algunos datos: en el norte de Portugal hay 200 empresas de componentes de la automoción, frente a 239 en Galicia. El volumen de negocio es de 8.400 millones de euros y dan trabajo a 45.000 trabajadores. En una década este sector creció en Portugal un 27 por ciento.

Los retos del sector de la automoción, en opinión de Esteves, están en superar trabas como la burocracia, la complejidad en la fiscalidad, los costes de producción, así como formar a los recursos humanos.En el ámbito textil, sin embargo, el discurso de Alberto Rocha, secretario general de Cointega (Cluster Textil de Moda) fue diferente al asegurar que el avance del sector depende de la competencia entre empresas.

En la inauguración de las jornadas, la presidenta del Consello Económico e Social, Corina Porro, recordó los ?lazos geográficos, históricos y culturales? que unen a Galicia y el Norte de Portugal y aseguró que hay "un intercambio creciente entre ambas regiones por la interrelación existente en una economía globalizada". Y, en su opinión, para poder competir es necesario "afianzar los vínculos" entre la comunidad gallega y el norte del país vecino y "lograr una especialización productiva".

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, destacó la importante vinculación entre Galicia y el Norte de Portugal en sectores como la automoción, el textil y el turismo y abogó por seguir "estrechando lazos".