Obtener rentabilidad de las investigaciones médicas que realiza el sistema público. Este es uno de los objetivos marcados en rojo por la Xunta, que pretende impulsar la comercialización de los proyectos que se gestionan en la red de hospitales gallegos. Para lograrlo, el Servizo Galego de Saúde (Sergas) ha contratado por 90.000 euros a una empresa privada para diseñar el "desarrollo de producto" de las diez investigaciones con mayor proyección, analizando las necesidades y vías de financiación potenciales, la gestión de sus patentes o las posibles fórmulas de colaboración con el sector privado.
Así consta en un contrato adjudicado el pasado 23 de diciembre a la firma Science Innovation Link Office, a la que el Sergas encargará una nueva edición del programa de promoción de los resultados de investigación del sistema público de salud de Galicia (PRIS). Existe, sin embargo, una diferencia fundamental, de momento, con la anterior convocatoria. Aquella contaba con 2,4 millones de euros de financiación asegurada gracias al programa Innova Saúde. Ahora no es así, por lo que la necesidad de buscar vías desde la que lleguen fondos aumenta.
La empresa será la encargada de radiografiar veinte proyectos seleccionados entre 33 proyectos presentados desde los servicios públicos de salud. Seleccionará las diez con más proyección y elaborará un "plan de desarrollo del producto" individualizado.
El objetivo pasa por diversificar esa selección, por lo que entre las 20 "preseleccionadas" existen varios tipos de proyectos. Ocho de ellos son productos terapéuticos; 6 son programas informáticos sanitarios; cuatro son dispositivos médicos y dos nuevas posibles terapias.
El plan comercial para cada uno de los diez proyectos que pasen a la ronda final pasará por la definición clara del producto, teniendo en cuenta su "viabilidad comercial", "ciclo de vida", capacidad para generar empleo o "atractivo empresarial", y un cronograma de fases para su explotación y llegada a los pacientes. Ahí tendrá especial relieve la "estrategia de gestión de la propiedad intelectual existente en cada proyecto y la propiedad intelectual futura que se espera generar", según señala el pliego del contrato con la empresa.
Además, deberá establecerse un plan de financiación con el posible análisis de socios privados para vender la investigación o asociarse, y un catálogo de ventajas del producto para orientar a posibles inversores futuros.
La financiación constituye un campo en el que el Sergas aspira a introducir el capital privado. De hecho, fuentes de la Consellería de Sanidade reconocen que este contrato está vinculado con su deseo de crear un fondo con donaciones empresariales para financiar sus proyectos, a cambio tanto de desgravaciones de hasta el 35% como de prioridad para asociarse en calidad de socio, como adelantó este diario en octubre. El Sergas dejó en manos de una empresa privada la captación de mecenas privados, de los que espera lograr 1,5 millones de euros, aunque medio millón sería un punto de partida aceptable, según el departamento de Jesús Almuíña.
Esta nueva edición del programa PRIS aspira a que al menos cinco de los proyectos den un paso adelante. El programa anterior, lanzado en 2013 con una financiación asegurada de 2,4 millones, analizó 32 investigaciones que han dado frutos, según Sanidade. A partir de ellos, ya se han creado dos empresas y se negocia abrir licencias con cuatro entidades internacionales. El Sergas confía, además, en que cinco o seis tecnologías sean comercializadas, entre ellas un software para rehabilitar pacientes con esquizofrenia o una terapia de regeneración muscular.
