Antiguos empleados del sindicato Xóvenes Agricultores (XX. AA.) presentarán una demanda por estafa, alzamiento de bienes, fraude en subvenciones y falsedad documental contra la dirección de esta organización. La central, en proceso de liquidación, no tiene ahora mismo una cabeza visible en la comarca ni en otras de Galicia, una vez que sus representantes o dejaron la central o incluso forman parte de los afectados y tienen pendientes demandas contra este sindicato.

La presentación de esta querella, que será registrada en los próximos días, fue dada a conocer por antiguos miembros de este sindicato en la comarca del Deza. En un comunicado, estos extrabajadores explican que la decisión de la Consellería de Medio Rural de no abonar la ayuda de asesoramiento a cientos de ganaderos por presunta falsedad de los justificantes y facturas presentadas por las entidades afines a la organización "grupo de empresas" fue el detonante para que estos afectados tomaran esta determinación. Además de indicar que en esta supuesta falsedad en la documentación "hace que a día de hoy se sientan estafados más de mil ganaderos de toda la comunidad autónoma", la querella contra la cúpula de Xóvenes Agricultores no será la única medida que se llevará a cabo. Así las cosas, los damnificados explican que existen sentencias condenatorias por despido improcedente, además de impagos de una anualidad, deudas con la Seguridad Social, Hacienda o con proveedores o alquileres.

Los afectados están siendo defendidos por el bufete ourensano Atrio Abad Abogados. Aseguran que la situación actual, después de un año de acciones judiciales, es la declaración de insolvencia de la mayor parte de las "asociaciones ligadas al grupo empresarial. Dicha insolvencia contrasta con el tren de vida y lujo que parece que llevan esos señores", expone el comunicado. Pero además, asegura que los mismos dirigentes que llevaron a la desaparición de dicho grupo de empresas, "ahora y sin pudor se presentan como la regeneración y con otro nombre -Asaja Galicia-, creando una red de asociaciones paralelas para operar y tratar de eludir toda la responsabilidad que se desprende de anteriores actuaciones y seguir cobrando ayudas y subvenciones públicas".

Este grupo de antiguos trabajadores de Xóvenes Agricultores puso en manos del citado despacho de abogados de la capital ourensana toda la documentación acreditativa con la que pretenden demostrar los presuntos delitos de: alzamiento de bienes, fraude en la recepción de subvenciones, falsedad documental y estafa, "así como otros que pudieran resultar de la instrucción penal".

Este diario trató sin éxito de contactar con antiguos representantes del sindicato en la comarca y a nivel autonómico.

Actualmente, solo queda de la organización su identificación y poco más. Sus diferentes problemas motivaron que algunos de sus representantes a nivel autonómico lo abandonasen tiempo atrás para o bien centrarse en su actividad profesional, o integrarse en otras centrales agroganaderas.

Ni siquiera el que era su secretario general, el dezano Francisco Bello, forma parte ahora de su organigrama. Sí está vinculado a la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), una vez que en marzo del año pasado fue elegido vicepresidente a nivel estatal.