La suya fue la única alcaldía que los populares aseguraron en el Val Miñor tras las municipales de mayo. El cuarto mandato de Jesús Vázquez Almuiña (1962) en Baiona, al que accedió en noviembre de 2004 con una moción de censura pactada con los independientes para tumbar la coalición de PSdeG y BNG. A partir de entonces el regidor se convirtió en uno de los barones del PPdeG en el sur. Médico de profesión, pasó por Povisa, el hospital Meixoeiro -donde fue gerente- y la dirección del Sergas en Pontevedra. Todo lo necesario, en principio, para asumir el puesto y la tarea de reconducir una de las consellerías más polémicas de la legislatura, especialmente por la crisis del Álvaro Cunqueiro. El salto le permite dar el cambio de aires que llevaba tiempo buscando y que el bloqueo del área metropolitana de Vigo, en la que el PP le quería como líder, frustró.